l Gobierno español repatrió en la noche del sábado a Senegal a 600 personas que habían llegado en cayuco a Canarias hace una semana, con las que ya son unos 750 los inmigrantes devueltos a sus países de origen en los últimos días, según informó ayer en Vigo el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. En un mitin de los socialistas gallegos – en compañía del presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño-, Rubalcaba explicó que con esta rápida actuación el Ejecutivo trata de enviar un mensaje muy claro a las mafias: “El que entre ilegalmente a España, va a volver por donde ha llegado”.

En Galicia el problema de la inmigración queda muy lejos. Los inmigrantes representan sólo el 2,6% de la población, frente al 9,2% de la media española. Pero esta cuestión constituye uno de los ejes de los frecuentes mítines de Rajoy. Ésta fue la percha que utilizó Rubalcaba para ofrecer los últimos datos sobre repatriaciones, operaciones muy complicadas en las que a menudo fallan las previsiones del Gobierno.

El ministro se refirió a la “llegada masiva” de cayucos del fin de semana anterior, cuando se truncó la evolución reciente. En abril, la Delegación del Gobierno en Canarias informó de que el número de personas que habían arribado a las islas en esas embarcaciones se había reducido en un 60% en el primer trimestre en comparación con el primer trimestre del año pasado.

En esta coyuntura y bajo la presión de la campaña electoral, el Gobierno trata de ofrecer una imagen de firmeza. Rubalcaba recordó que ya la semana pasada anunció que se procedería a la repatriación inmediata, “y así lo hemos hecho”, concluyó. Sobre un millar de inmigrantes, el Ministerio del Interior ha devuelto en los últimos días a 750 a Senegal, Mauritania, Marruecos y Guinea-Bissau, según Rubalcaba, quien destacó la colaboración de estos países.

Mientras tanto, la llegada de inmigrantes continúa. Durante este último fin de semana, un total de catorce personas procedentes de Marruecos y países subsaharianos que viajaban en dos pateras alcanzaron las costas de Canarias. Todos ellos fueron ingresados en el centro de retención de la isla, a la espera de ser devueltos a sus países de origen transcurridos 40 días, tal y como marca la ley.

Fuera de España, dos inmigrantes que trataban de llegar a Italia murieron de agotamiento mientras realizaban el viaje en patera, según relataron las 26 personas de origen africano que viajaban con ellos. El grupo fue socorrido en alta mar el domingo por los guardacostas italianos cerca de la isla de Lampedusa.