Rubalcaba asegura que es un «mensaje inequívoco» para las mafias El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunció ayer que la noche del sábado fueron repatriados 600 inmigrantes que intentaron entrar en las islas Canarias, en lo que pretende ser un «mensaje inequívoco a las mafias». Desde el pasado lunes, 750 sin papeles que llegaron el fin de semana del 12 de mayo han sido expulsados a sus países.

Poco antes de participar en Vigo en un mitin para apoyar al candidato socialista a la Alcaldía, Abel Caballero, Rubalcaba recordó que en los últimos días ha habido una llegada «importante» de embarcaciones ilegales a Canarias, tras lo que el Gobierno anunció que se repatriaría a quienes entrasen de forma irregular en España, según informa Efe.

«Efectivamente, eso hemos hecho y esta noche hemos repatriado, con la ayuda inestimable del Gobierno de Senegal, a casi 600 ciudadanos de este país que habían intentado entrar ilegalmente en España», manifestó el titular de Interior.

Según informó, a estos senegaleses hay que sumar un conjunto de marroquíes, mauritanos y de Guinea – Bissau que fueron repatriados la pasada semana, con lo que hasta ahora son unos 750 los inmigrantes enviados a sus países. Rubalcaba insistió en que durante la próxima semana será repatriado el resto de los que intentaron entrar ilegalmente en España.

«Estamos tratando de mandar un mensaje inequívoco a las mafias, y es que quien entre ilegalmente en España» debe salir, para lo que Interior cuenta «con la ayuda de países como Senegal, Marruecos, Mauritania, Guinea – Conakry y Mali», señaló el ministro. Rubalcaba destacó la colaboración de los países de origen de los inmigrantes e insistió en que las repatriaciones son «un tema personalmente duro, pero creo que este mensaje tiene que quedar claro».

El Gobierno sigue trabajando para intensificar la colaboración de los lugares de origen en la lucha contra la inmigración clandestina. Así, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, viajará el jueves a Mauritania para entrevistarse por vez primera con las nuevas autoridades del país, a las que subrayará la necesidad de que este Estado próximo a las islas Canarias «siga cooperando» en la lucha contra la inmigración ilegal.

Tras las intensas negociaciones mantenidas por Exteriores, el Ejecutivo mauritano accedió a que los últimos 23 ocupantes del Marine I saliesen de la nave de pescado en la que permanecieron encerrados durante tres meses para ser enviados a un centro de acogida. La medida se produjo tras las duras críticas lanzadas desde las ONG contra el Gobierno de Zapatero por recluir durante 96 días a los sin papeles sin autorización judicial ni asistencia letrada.

El Ejecutivo español ha reiterado en diversas ocasiones su agradecimiento a Mauritania por el papel desempeñado durante la crisis del barco negrero Marine I al aceptar que sus 369 ocupantes desembarcaran en Nuadibú. Los 23 inmigrantes, que se han negado a regresar a sus países alegando que sus vidas corren peligro, permanecerán en el centro de acogida mientras se tramitan sus expulsiones. Exteriores está negociando con Pakistán, por las sospechas que se tiene de que estos sin papeles proceden de este país.

Frente a la avalancha de cayucos del fin de semana anterior, este último ha registrado muchas menos llegadas y tan sólo 14 inmigrantes arribaron en dos pateras al archipiélago canario.