Las Islas Canarias recibieron este fin de semana la mayor oleada de inmigrantes en lo que va de año. En cayucos o barcas neumáticas, los subsaharianos detenidos superan el medio millar.

La última embarcación fue localizada ayer a 90 millas al suroeste de Tenerife, con un centenar de ocupantes, entre los que hay tres o cinco que son menores de edad.

La previsión es que lleguen alrededor de las 09:00 de la mañana de hoy al puerto de Los Cristianos.

Antes de este grupo, arribaban 70 subsaharianos, sobre las 4:30 horas de ayer, domingo, al puerto grancanario de Arguineguín, en el término municipal de Mogán.

El cayuco en el que viajaban fue interceptado por Salvamento Marítimo cuando navegaba al sur de la isla, una vez fue descubierto por una dotación de la Guardia Civil cerca de la costa.

Cuatro de los “sin papeles” tuvieron que recibir asistencia médica en el Centro de Salud de Maspalomas. Según los sanitarios, estas personas presentaban respectivamente hipotermia, un traumatismo en una muñeca, dolor abdominal y taquicardia, síntomas habituales en las tripulaciones de estas embarcaciones precarias. En este grupo había, además, dos menores de edad.

A 160 millas al sur

Sin embargo, esta no fue la única llegada de inmigrantes de la madrugada. Otro grupo de 77 personas que viajaba a bordo de una embarcación fue detectado por la tarde a 160 millas al sur de Tenerife. Tras desplegar el operativo de rescate habitual en estos casos, arribó al filo de la medianoche remolcado por la embarcación de Salvamento Marítimo “Salvamar Adhara” a la isla de El Hierro.

A estos dos grupos se suman los cerca de 350 que fueron llegando entre el viernes y el sábado, cuando viajaban en once embarcaciones que arribaron a las islas de Tenerife, Gran Canaria y Lanzarote.

De esta manera, los inmigrantes capturados en las costas españolas ascienden a casi 500 personas, en un flujo que se ha incrementado con la bonanza de tiempo, ya que se ha experimentado en los últimos días una subida de las temperaturas que ha alentado las salidas desde las costas africanas. Esta llegada masiva ha comenzado a abarrotar las dependencias habilitadas para su acogida, previa a los procesos de repatriación a sus países de origen.

En los primeros cuatro meses de 2007, la llegada de inmigrantes ilegales al Archipiélago canario disminuyó notablemente, 2.166 frente a los 4.606 que fueron contabilizados en el mismo período del año anterior. Durante el ejercicio de 2006 llegaron a Canarias más de 31.200 personas, una cifra superior al total de inmigrantes registrados en los cuatro años precedentes y tres veces mayor que el anterior récord de 2002, establecido en 9.929 “ilegales”.