La última barca llevaba 101 subsaharinos y se prevé que esta madrugada llegue otra La Guardia Civil detuvo ayer a 101 inmigrantes cuando navegaban frente a las costas del sur de Tenerife. Con esta embarcación, ya son once los cayucos que han llegado a Canarias desde el viernes y que han dejado a más de 350 inmigrantes en sus costas, una cifra de personas difícil de calcular dado que muchos lograron escapar al cerco policial.


El último cayuco fue avistado por una patrullera de la Guardia Civil durante la madrugada del sábado cuando se acercaba a Tenerife, frente a las costas del aeropuerto Reina Sofía, en el sur de la isla. Una lancha de Salvamento Marítimo recogió el cayuco y lo remolcó al puerto de Los Cristianos, donde fueron desembarcados los 101 inmigrantes de origen subsahariano, entre los que se encontraba una mujer.


Las Guardia Civil sospecha en el grupo viaja un menor, por lo que encargó a los médicos que realizaran las pruebas oportunas para determinar su edad.


Los inmigrantes , todos en aparente buen estado, fueron trasladados hasta un centro de acogida para proceder a su identificación, previa a la repatriación.


Nuevo cayuco

A esta embarcación hay que añadir la avistada este sábado por una embarcación de recreo a 165 millas al sur de Tenerife, según informó la Delegación del Gobierno.


La embarcación de Salvamento Marítimo
Salvamar Adhara
viajó hasta al cayuco para remolcarlo hacia tierra. Un helicóptero también acudió hasta el lugar para evacuar a posibles inmigrantes heridos.


Las autoridades prevén que el cayuco llegue a Los Cristianos en la madrugada de hoy, domingo.


Durante la jornada del viernes llegaron a Canarias 241 subsaharianos a bordo de una decena de embarcaciones, siete de la cuales tocaron tierra en Gran Caia, una en Lanzarote y dos en Tenerife.


A los 241 inmigrantes detenidos hay que sumar un número indeterminado de ocupantes de las pateras que logró escapar y esconderse en distintas playas del sur de Gran Canaria y en una de Lanzarote, aunque varios de ellos fueron detenidos después. La llegada de estas embarcaciones coincide con un periodo de altas temperaturas y calima en el archipiélago canario, donde la mar está muy tranquila estos días.


Ante esta situación, el candidato popular a la presidencia canaria, se comprometió ayer a tomarse “en serio” el problema de la inmigración en Canarias y a exigir al Gobierno que “selle” las costas canarias si saliera ganador de las elecciones del 27 de mayo. No obstante, admitió no confiar que se cumplan sus demandas.