?ueve años de cárcel pidió el fiscal para el argelino Kamel Sedrati, acusado de tres delitos de prostitución en clubes de alterne de Becerreá y O Corgo, en la provincia de Lugo. El juicio tuvo lugar ayer y el imputado negó buena parte de las acusaciones formuladas contra él por una de sus empleadas.


El fiscal aseguró que el acusado, entre febrero y diciembre del año 2005, tuvo alquilados los clubes La Fuente de la Alegría, en Becerreá, y Soraya, en O Corgo, en los que daba trabajo a mujeres sin permiso de residencia y en malas condiciones económicas a las que luego supuestamente explotaba. Al parecer, les cobraba 10 euros por cada pase; la misma cantidad por copa y cinco por la calefacción que sólo funcionaba tres horas al día. La acusación pública también le imputa haber golpeado a una mujer en agosto del 2005. La afectada tuvo varios hematomas y tardó seis días en curar.

El imputado dijo que las mujeres que trabajaban en sus clubes tenían libertad para entrar y salir. Sólo les cobraba 20 euros diarios por la estancia, la comida y la calefacción. Trabajaban, dijo, en los establecimientos de forma voluntaria. Negó, a su vez, traficar con drogas o estar en posesión de armas.

La autora de la denuncia dijo que el argelino les pasaba droga y luego se la descontaba de lo que cobraban. Ellas tenían que entregar todo lo que percibían de los clientes y, al final del día, el acusado repartía las ganancias sin ningún criterio. La denunciante afirmó que las mujeres que tenían deudas no podían abandonar los locales. Señaló, a su vez, que algunas que no podían acudir a trabajar eran sancionadas con multas.