Aida Egurrola es la responsable del Servicio de Atención al Inmigrante de CC OO. Licenciada en Derecho, asesora a los extranjeros en las más diversas cuestiones y desde su puesto de trabajo observa cómo el miedo les atenaza. El temor a represalias, a quedarse sin empleo o ser expulsados del país les invade.

– ¿Conocen los extranjeros este servicio de CC OO?

– En general se puede decir que hay mucho desconocimiento sobre todas las organizaciones y servicios que están a su disposición. La gente que no tiene papeles tiene pánico a acercarse a las entidades, sean del tipo que sean.

– ¿Por qué?

– Están convencidos de que les vas a delatar, pero no son conscientes de que las tramitaciones que hacemos son para nuestra propia contabilidad, no para dar su identidad. Es como si tuviéramos un secreto profesional.

– ¿Reciben muchos abusos por parte de los empresarios?

– La verdad es que nos llegan muchos casos y sabemos de la existencia de muchos más porque les engañan. Al final, en la mayoría de los casos, prefieren callarse y tragar con lo que les echen. Al menos, como dicen ellos, no hacen mal a nadie y no están robando.

Ahogado con hipoteca

– ¿Viven mal en Miranda?

– Hay de todo, desde el que está ahogado con la hipoteca y los gastos del día, como cualquier otro mirandés, al que le falta casi de todo.

– ¿Qué les recomienda en estos casos?

– Que se venda España como un paraíso porque las cosas aquí no son fáciles para nadie.

– ¿Es complicado ganarse su confianza?

– Cuesta mucho que te digan la verdad porque tienen miedo y al principio se la tienes que arrancar o irla averiguando poco a poco. Una vez cogen confianza, todo es distinto.

– Hacerse entender será muy complejo.

– Es verdad que hay muchas nacionalidades, pero al final te acabas entendiendo con diccionarios, gestos o, en el caso de los árabes, llamando a mi compañero de Burgos. Es cuestión de querer entenderse.