F. A.

Es el quinto asalto de Jean – Marie Le Pen a la Presidencia de la República y casi con toda seguridad el último. Su viejo programa «chauvinista» y antiinmigración, abiertamente enemigo de la Unión Europea, sigue siendo básicamente el mismo. La gran cuestión de esta liza electoral es saber quién tomará su testigo, y en qué condiciones.

Trabajo y empleo. Renegociar la duración de la semana laboral por sectores. Suprimir el 50 por ciento de las subvenciones del Estado a las empresas. Instaurar cuotas de importación y un sistema de barreras arancelarias. Exigir a las empresas que se deslocalizan a devolver las ayudas y subvenciones estatales.

Europa. Salir del espacio Schengen (libre circulación). Exigir una renegociación «radical» de los tratados comunitarios, y en caso de rechazo por parte de los socios de la UE organizar un referéndum sobre la «independencia de cara a Bruselas».

Justicia y seguridad. Contratar 5.000 nuevos jueces. Restaurar la pena de muerte «para los crímenes más graves». Bajar a los 10 años la mayoría de edad penal. Construir 75.000 nuevas plazas en las cárceles. Generalizar la «tolerancia cero». Cerrar las mezquitas que estén dirigidas por integristas.

Inmigración. Jean – Marie Le Pen quiere reservar sólo a los franceses las ayudas sociales y familiares. Suprimir la reagrupación familiar de inmigrantes y la adquisición automática de la nacionalidad. Bajar de diez a tres años la duración del permiso de estancia en el país.

Medio ambiente. El Frente Nacional no tiene como tal un programa ecológico.