Los ministros europeos del Interior acordaron ayer crear unidades de reacción rápida para su despliegue en caso de llegada masiva de inmigrantes a las fronteras de algún Estado miembro de la Unión Europea. Este año, la agencia europea Frontex tiene asignados para patrullar las aguas de Canarias y el Mediterráneo una flotilla de 116 barcos y 58 aeronaves que son aportados por los países comunitarios.

Compuestos por 450 guardias fronterizos, los equipos de reacción rápida «serán desplegados en un período de tiempo limitado, en situaciones de emergencia y excepcional presión, como la llegada de un amplio número de personas a un país tercero intentando ingresar en forma ilegal», explicó un comunicado de la Comisión Europea. Frontex decidirá el despliegue a petición de un Estado miembro en un plazo de cinco días. Los guardias fronterizos estarán autorizados a recurrir a la fuerza y portar armas si el país demandante así lo decide, según el reglamento aprobado.

Más medios

Según la Presidencia alemana de la UE, la aprobación formal de este reglamento podría tener lugar en junio próximo y los equipos estarían en condiciones de operar a finales de 2007 o principios de 2008. En cuanto a los medios para afrontar la avalancha de pateras de este año, Frontex tenía ya cubiertas en febrero el 50% de sus necesidades, con 8 aviones, 48 barcos y 13 helicópteros.

El director de la agencia, Ikka Laitinen, detalló ayer a los ministros del Interior que los medios a su disposición se han duplicado hasta alcanzar 116 barcos, 21 aviones y 27 helicópteros, además de 392 equipos – desde radares a detectores térmicos – . FRONTEX realizó el pasado verano una serie de operaciones para frenar los flujos migratorios procedentes de África a través del Mediterráneo y hacia las Canarias. La última operación ha permitido interceptar hasta el 12 de abril a 1.167 inmigrantes ilegales, mientras que otros 585 llegaron a tierra.