El movimiento de los ilegales consiguió atención pública internacional el
año pasado cuando consiguió sacara a decenas de miles de personas a las
calles de varias ciudades de EE UU para pedir una solución justa a su
situación. Ese movimiento se ha estancado ahora como se pudo comprobar el
pasado domingo en Los Ángeles cuando una manifestación por los derechos de
los inmigrantes a penas consiguió convocar a unas 10.000 personas en una
ciudad con millones de personas de origen hispano.