Madrid – No se andaban con contemplaciones. Más de una cámara de seguridad
da fe de que preferían noquear salvajemente a un dependiente que negociar
con él. Catorce individuos de nacionalidad rumana han sido detenidos por
la Policía Nacional de Madrid como presuntos integrantes de una violenta
banda de atracadores. Como suele suceder en estos casos, todo valía, y se
ha comprobado que robaban en joyerías pero también en domicilios
particulares, y que no le hacían ascos a la clonación de tarjetas de
crédito.
   De hecho, la Policía tenía constancia de que, en el
momento en el que se produjeron las detenciones, tenían ya preparado su
próximo atraco, a una joyería de Alcalá de Henares. Varios miembros de la
banda tenían previsto desplazarse hasta Alcalá desde sus residencias en
Torrent (Valencia).
   En los preceptivos registros, se ha incautado un
cuantioso botín, que incluía joyas, teléfonos móviles, un frontal de
cajero con microcámara, 18 tarjetas con banda magnética, otras siete
sustraídas, un ordenador portátil, dos sprays lacrimógenos, cizallas y
útiles de obra.
   El valor de lo incautado alcanza los 300.000
euros, si bien se supone que la mayor parte de lo robado ya está fuera de
España. La técnica del grupo criminal era realizar numerosos viajes a
Rumanía para dejar allí lo sustraído y volver luego a España para
delinquir. Hasta el momento se han esclarecido dos asaltos a joyerías y
cuatro robos en domicilios: dos en Madrid y dos en Valencia,
cometidosdurante este año.
   Los detenidos son Marius C., de 28
años, con un antecedente. Gabriela M., de la misma edad, con 4
antecedentes el último a causa de hurto. Andreea P.,. Vasílica Valentina
L., Marius Dumitru C., Marian S., Ion Vasile N., Gigi Remus N., Costel
Marius O., los siete sin antecedentes. Cristinel Sergiu O., de 23,
detenido en dos ocasiones, Alexandru Emilian B., también con dos
antecedentes, Marius Stefan T., de 25, detenido en dos ocasiones, la
última por resistencia y desobediencia y Alin Constantin B., los cuatro
con dos detenciones anteriores, Lorina Mihaela G., de 28, que ha utilizado
dos identidades; con una ha estado detenida en cinco ocasiones y con la
otra una. Los once primeros han ingresado en prisión por orden del juez
que entiende del asunto.
   Trabajo en equipo
   Cinco o seis delincuentes participaban en cada robo: dos o tres
entraban y el resto quedaba en el exterior en labores de contravigilancia
y cobertura; siempre iba con ellos una mujer, que conseguía que le
franquearan el acceso al establecimiento. Alguno de estos individuos ha
sido vigilantes de seguridad en Rumanía y varios han sido reconocidos por
las víctimas. La operación es consecuencia de otra, en la que se detuvo a
un grupo organizado de ciudadanos rumanos, que copiaba tarjetas.