Las 'camas calientes' dejan pingües beneficios a los dueños de las viviendas

Diario de noticias de Alava, c. martín, 30-03-2007

En muchos casos, son los inquilinos iniciales los que realquilan las habitaciones c. martín

vitoria. Los dueños o los responsables de las viviendas convertidas en pisos patera doblan con estos arriendos el beneficio que lograrían con el alquiler legal del inmueble completo. En la capital alavesa, la media de alquiler de una vivienda libre se eleva a 931 euros, según los datos del último barómetro elaborado al respecto por la inmobiliaria Trinosa. Esos precios, en la mayoría de los casos, son prohibitivos para los inmigrantes , por lo que la oferta de habitaciones y camas por separado es una alternativa para poder alojarse en la ciudad. Según diferentes estamentos, esa oferta podría devenir en ingresos mensuales que superarían los 2.000 euros por cada piso patera , considerando éstos como inmuebles con cuatro estancias y con dos lechos por cada una de ellas, que se ofertarían a un mínimo de 250 euros.

Esto implica situaciones paradójicas, en las que el propietario del piso alquilado, y después realquilado, no conoce la situación y cuando llega a su conocimiento, desaparece el inquilino original, dejando como víctimas a los inmigrantes realquilados, que son abandonados a su suerte, “ya que son desahuciados”, concluye Federico García, de SOS Racismo.

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