Tlaxcala (México) -. Personal del Instituto Nacional de Migración (INM) interceptó a un total de 138 indocumentados centroamericanos después de un operativo en el sistema ferroviario del municipio de Apizaco, en el Estado de Tlaxcala (centro de México), confirmaron hoy fuentes oficiales.

El delegado del INM en Tlaxcala, Fernando Azael, dijo que personal de migración realizó ayer un operativo en distintos tramos ferroviarios de ese municipio donde hallaron a 129 hondureños, 3 guatemaltecos y 6 Salvadoreños indocumentados.

Durante el operativo, que duró aproximadamente ocho horas, los agentes migratorios revisaron las inmediaciones de las vías del tren, los vagones de carga y los patios de la estación ferroviaria.

El delegado destacó que las autoridades no pudieron detener a ningún “pollero” (traficante de personas) que estuviera en compañía de los centroamericanos.

Después de su captura, las personas fueron sometidos a una revisión médica y posteriormente los trasladaron a la estación migratoria de la Ciudad de Tapachula, en el estado mexicano de Chiapas (sureste), desde el cual serán repatriados a sus países de origen.

El central estado de Tlaxcala es una ruta común para los inmigrantes que viajan a bordo de los trenes de carga desde la frontera sur de México con el objetivo de cruzar hacia Estados Unidos.

El martes pasado, en el vecino estado de Puebla (centro), un total de 112 indocumentados hombres, mujeres y niños procedentes de Honduras, El Salvador y Guatemala fueron encontrados por la policía mexicana al interior de una casa de seguridad en el municipio de Amozoc de Mota.

En lo que va de 2007 el INM ha capturado 613 indocumentados en los diferentes operativos que realiza en territorio mexicano.

NUEVA REDADA

Más de 50 personas, muchas de ellas inmigrantes ilegales, fueron arrestadas por el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) en la ciudad de Baltimore (Maryland, este), una hora al norte de la capital estadounidense, por violaciones a las leyes migratorias, informaron las autoridades este jueves en un comunicado.

Los arrestados eran trabajadores de una agencia de trabajo temporal llamada Jones Industrial Network, y de algunas compañías que daban empleo a inmigrantes ilegales a través de esa empresa.

Doris Depaz, activista que integra la organización Casa de Maryland que apoya a inmigrantes hispanos en ese estado del este norteamericano, dijo a la AFP por teléfono desde Baltimore, que en total son 69 las personas detenidas en la redada, de las cuales 46 son mujeres, muchas de ellas madres con hijos.

En el grupo hay personas de México, Honduras, El Salvador, Costa Rica, Ghana y Kenia, añadió Depaz, quien precisó que los detenidos trabajaban mayoritariamente empacando ropa.

La gente del lugar está “muy dolida, muy triste” tras la redada que se produjo a las 9H15 locales (13H15 GMT), dijo la activista.

“Anoche nos dimos cuenta porque un pastor vio varios vehículos, seis buses en el centro de detención” y “empezamos a hablar anoche a las radios para poner en alerta” a los inmigrantes, explicó.

Las autoridades migratorias estadounidenses realizan redadas en empresas que violan las leyes migratorias vigentes.

El operativo anunciado este jueves se produce menos de una semana después de que legisladores demócratas y republicanos presentaran un proyecto de reforma migratoria que abre el camino a la legalización de los inmigrantes indocumentados en el país, cuyo número se estima en 12 millones de personas.

“La acción de hoy del ICE es parte de una agresiva persecución del ICE de los empleadores que violan la ley”, dijo en el comunicado la subsecretaria de Seguridad Interior, Inmigración y Aduanas, Julie Myers.

“Las acciones contra lugares de trabajo apuntan a un componente clave de la estructura ilegal de apoyo que permite a la inmigración ilegal florecer”, añadió la funcionaria.

“En todos los casos, a los extranjeros indocumentados (detenidos) se les tomarán las huellas dactilares y serán puestos en proceso para su remoción (deportación) de Estados Unidos”, añade la nota.

El ICE aseguró que considerará razones humanitarias para eventualmente liberar a alguno de los arrestados, por ejemplo si se trata de padres o madres solteras, o se trata de una personas con problemas de salud.