La Subdelegación del Gobierno volverá a prohibir tomar tierra a los pasajeros sin la documentación en regla La policía española impidió ayer que tomaran tierra en Cádiz un grupo de 82 ciudadanos bolivianos que viajan en el barco MSC Sinfonía. La siguiente escala del crucero es Valencia, puerto al que llegarán a primera hora de la tarde de hoy.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz informaron de que la Comisaría General de Extranjería, con sede en Madrid, ordenó que se prohibiera el desembarco a estos pasajeros. Aunque no concretaron la razón exacta para impedir su entrada en territorio español, las mismas fuentes apuntaron que los bolivianos carecen de la documentación necesaria.

Desde la compañía MSC Cruceros, a la que pertenece el barco Sinfonía, dijeron desconocer las razones por las que se impidió a estos ciudadanos bajar en Cádiz y, a finales de la semana pasada, en una escala anterior en Santa Cruz de Tenerife.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Valencia argumentaron que si este grupo de bolivianos vuelve a solicitar hoy pisar suelo español “se les aplicará la legislación española, como ha ocurrido en Cádiz y Santa Cruz de Tenerife”.

“En caso de que tengan la documentación en regla no se les dejará bajar a tierra”, auguraron

Agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) impidieron que los bolivianos tomaran tierra en el puerto gaditano por alguno de los siguientes tres motivos. El primero es poseer un pasaporte que esté en regla.

La segunda posibilidad es tener en vigor una orden de expulsión (o de prohibición de retorno).

La tercera razón es que lo impida una resolución judicial dictada en Bolivia o cualquier país del espacio Schengen, en el que se incluyen casi todos los miembros de la Unión Europea.

El próximo domingo, día 1 de abril, entra en vigor la necesidad de que los turistas bolivianos tengan un visado para visitar España.

Sin embargo, aunque este requisito aún no esté vigente, las autoridades policiales pueden exigir a cualquier turista que disponga del dinero suficiente para mantenerse, como turista, durante un máximo de tres meses.

1.500 euros el viaje más barato

Carecer de los 900 euros necesarios (30 por día) no fue ninguna de las causas citadas por fuentes gubernativas para impedir el desembarco de ninguno de estos turistas latinoamericanos.

Cuatro de ellos sí pudieron bajar pero fueron trasladados por los agentes al aeropuerto, ya que contaban con un billete de avión para regresar a su país.

El MSC Sinfonía partió el pasado 15 de marzo de Río de Janeiro y, en los siguientes días, hizo dos escalas en otros dos puertos brasileños: Salvador de Bahía y Fortaleza.

Desde este último puerto partió hacia Canarias. Según aseguraron fuentes oficiales de la compañía de cruceros, el barco partirá esta misma noche hacia Génova, donde concluirá el viaje.

El camarote más barato para un crucero desde Río de Janeiro es de unos 1.500 euros, según las tarifas provisionales de la compañía. El billete más caro supera los 3.000 euros.

Desde MSC Cruceros apuntaron que esta es la primera vez que se impide el desembarco en algún puerto español de un pasajero de sus barcos. Las mismas fuentes agregaron que los bolivianos pretendían que Santa Cruz y Cádiz fuera su último destino; es decir, que no se trataba de hacer una visita turística.

Tras arribar a Italia, el MSC Sinfonía tendrá que volver a Valencia. Este puerto es el punto de origen de una nueva serie de cruceros de ocho días que, a partir del 18 de abril, recorrerá diversos países del Mediterráneo: Túnez, Malta, Italia y la ciudad de Montecarlo.

El MSC Sinfonía tiene capacidad para 1.600 pasajeros y 760 tripulantes. Aunque la empresa de cruceros no pudo concretar el número de personas que viajan actualmente en este trasatlántico, desde el Gobierno hablaron de alrededor de 500.

Desde el Consell confiaron “en el sentido común y el buen hacer” de la Delegación del Gobierno en la Comunitat y que no tomen tierra los pasajeros “que no reúnan las condiciones” necesarias.

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