M. P.

MADRID. BBVA finalizó 2006 con 552.000 clientes inmigrantes, tras un aumento de 160.000 durante dicho ejercicio, y en 2007 espera superar los 700.000 mediante la captación de otros 180.000, según los datos facilitados ayer por la entidad.

La estrategia lanzada hace dos años por el grupo, que combina la fortaleza de la red BBVA y la especialización de la red de «Dinero Express», muestra, según el banco, unos resultados «muy positivos».

BBVA contará a finales de abril con 30 oficinas «DUO», que operarán en horario bancario, de 8 a 3, como una sucursal normal y por las tardes y festivos como «Dinero Express».

En dos años, el grupo ha aumentado de 2 a 4 el número medio de productos por cliente y en 2006 duplicó los envíos de remesas hasta 780.000. «Los inmigrantes son un segmento estratégico para BBVA», señaló Miguel Ángel Muñoz, director de Banca de Inmigrantes del Grupo.