El último informe hecho público por el Institut d´Estadística de Catalunya, difundido el pasado mes de enero, detallaba que en el año 2006 se casaron en Catalunya 31.140 parejas, lo que significaba un descenso de los enlaces de un 2,8% respecto al año 2004. El 80,2 por ciento de las parejas estaban formadas por españoles. A pesar del descenso general, creció el número de uniones entre español y extranjera. En el año 2006, se formaron 2.891 parejas de este tipo, un 9,4% del total, mientras que en el año anterior hubo 2.808 enlaces. A modo de curiosidad, los varones españoles prefirieron mujeres sudamericanas, pues de este origen eran el 50% de las contrayentes, y sobre todo colombianas; a continuación se situaron las europeas, que eran un 12% y fundamentalmente rumanas.

En cuanto a las bodas entre españolas y extranjero, se mantuvieron prácticamente estables, pues hubo 1.699 enlaces en el 2005, mientras que en el 2004 se llevaron a cabo 1.698. Ellas también prefirieron a los sudamericanos, concretamente en el 35,1% de los casos, decantándose por los argentinos, seguidos de los europeos, 20,2%, predominando los italianos.

En el ámbito español, los matrimonios entre nacionales y extranjeros han crecido sin cesar, de la misma forma que se ha incrementado el censo de inmigrantes. De esta forma, si en el año 2003 los datos reflejan que se habían producido 6.925 enlaces, y en el 2005 se registraron 10.970, se dio un aumento del 58,41%. Donde se inscribieron más fue Madrid, seguido de Catalunya.