Bailén 22 baja la persiana

Bailén 22 cierra sus puertas ante la presión municipal, policial y de los vecinos

La Vanguardia, Silvia Angulo  | , 15-03-2007

Bailén 22 ha tirado la toalla. Tras siete años de dura convivencia con el Ayuntamiento y los vecinos del barrio, el local erótico ha cerrado sus puertas de manera indefinida. Ayer a las siete de la tarde – hora habitual de apertura – el club no abrió al público. En su interior se encontraban algunos trabajadores que se acercaron a recoger sus pertenencias. Durante el mediodía los propietarios del local presentaron en el distrito del Eixample una instancia de cese de actividad, según explicaron a La Vanguardia fuentes cercanas a la empresa. De todos modos, la revocación de la licencia y el consecuente cierre del showgirls por parte del Ayuntamiento era cuestión de días.
>

La presión vecinal, los expedientes administrativos abiertos hace dos semanas y sobre todo la redada policial del pasado sábado que concluyó con la detención del gerente del club habían hecho insostenible su pervivencia. Por la mañana, la concejal del distrito del Eixample, Assumpta Escarp, explicó que el Ayuntamiento estaba reuniendo todos los expedientes abiertos al local para “ser contundentes y que de una vez por todas cesen su actividad”. Una amenaza que la concejal anunció que se cumpliría lo antes posible.
>

En este sentido, reiteró que el showgirls tiene dos expedientes administrativos abiertos que están en periodo de alegaciones. Uno por romper el precinto del sótano y el otro por practicar una actividad diferente de aquella por la que se concedió la licencia de café teatro. También existe el atestado policial de la redada del sábado, que ha abierto la vía penal contra el gerente del club por presuntos delitos contra los derechos a los trabajadores, otro relativo a la prostitución y un tercero por favorecer a la inmigración ilegal.
>

Fuentes cercanas a la empresa explicaron que durante estas últimas semanas la presión ha sido insostenible. Por eso, de manera voluntaria la propiedad ha decidido cerrar y no volver a abrir. No es la primera vez que toman una decisión de esta magnitud. En el 2001, después de precintarse la planta sótano por practicarse la prostitución, la empresa anunció que no abrirían hasta que el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya se pronunciase sobre el recurso presentado contra el precinto. Esta decisión dejó fuera de juego durante dos meses el local que volvió a abrir.
>

Las mismas fuentes especifican que la empresa ya ha presentado sus alegaciones dirigidas a demostrar que Bailén 22 es un café teatro con espectáculo. Además, sobre el desprecinto del sótano y el hallazgo de un tipo de mobiliario que distaba mucho del trastero que en otras inspecciones tenían los propietarios, se explica que en la redada policial del sábado la Guardia Urbana pudo comprobar que en esa planta no se ejerce ningún tipo de actividad. Otra de las causas que habían provocado el expediente ya se ha solucionado. El lunes los bomberos de Barcelona acudieron al local para comprobar las medidas de seguridad en materia de incendios y determinaron, según fuentes de la propiedad, que todo estaba correcto.
>

La empresa propietaria de Bailén 22 informó del cierre definitivo a los vecinos de que durante años habían ejercido la lucha contra el local erótico. Éstos acogieron la noticia con escepticismo, ya que tal como recordaron no es la primera vez que actúan de esta manera. Una miembro de la junta de la asociación Eixample Sostenible criticó que no fuera la concejal del distrito la que llevara a cabo el cierre del striptease “tal como había prometido”. En este sentido, aseguró que era muy distinto que la decisión emane del Ayuntamiento que de los propietarios. Los vecinos temen que sea una argucia para volver a abrir cuanto antes. “Entonces volverán a repetirse las inspecciones municipales para demostrar algo que está en boca de todos”, aseguró. Esta vecina denunció también que algunas personas del barrio estaban recibiendo amenazas a consecuencia del cierre del local erótico.
>

Ayer la inactividad era manifiesta a las puertas del Bailén 22. Una de las dos persianas permaneció bajada durante todo el día y a él sólo se acercaron algunos empleados y trabajadoras, pero no se vio ningún cliente.
>

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)