LONDRES. La Comisión Independiente de Quejas a la Policía (IPCC, en sus siglas en inglés) ha abierto una investigación sobre la agresión de un agente a una joven de raza negra a la que propinó cinco puñetazos para reducirla antes de detenerla. Las imágenes de la paliza a Toni Comer, de 20 años, captadas por las cámaras de seguridad a las puertas de una discoteca de Sheffield (norte inglés) han causado conmoción en el Reino Unido, donde las organizaciones de derechos civiles han pedido una investigación al más alto nivel.

El agente, Anthony Mulhall, ha sido retirado de cualquier servicio que implique contacto con el público, aunque no ha sido suspendido mientras se investigan los hechos, informó la Policía del condado de South Yorkshire (norte inglés), a la que pertenece. «He visto la grabación de las cámaras de seguridad y he decidido que es de interés público la apertura de una investigación completamente independiente», afirmó Nicholas Long, representante de la IPCC. Explicó que la investigación examinará las circunstancias en las del suceso, ocurrido en julio pasado, «para determinar si la fuerza usada por el agente cuando hizo la detención estaba justificada y era proporcionada».

La joven, por su parte, reclamó ayer que se hiciera justicia para que hechos como éste no vuelvan a ocurrirle a nadie en el futuro. «Yo pensaba que la Policía detenía a la gente por hacer eso, no que lo hacían ellos», manifestó a la agencia británica de noticias PA Comer.

Niegan racismo

La Policía del condado de South Yorkshire ha señalado que la joven estaba siendo arrestada, tras haber sido expulsada de una discoteca por conducta agresiva, por un delito de daños a un vehículo, del que el miércoles se confesó culpable ante un tribunal. Además se ha comprometido a investigar lo sucedido, aunque ha negado que se trate de un caso de discriminación racial y ha mostrado su apoyo a la actuación del agente, que alega que tuvo que golpear a la mujer porque se resistía al arresto.

El vídeo, obtenido por The Guardian y divulgado el miércoles por la noche por la BBC2, muestra a Mulhall dando cinco puñetazos en una parte del cuerpo imprecisa a Comer, que luego es arrastrada por otros dos policías a un vehículo policial con los pantalones a la altura de las rodillas. En un comunicado, el agente reconoció haber pegado a la joven en el brazo «con toda la fuerza de que fue capaz» para reducirla y poder esposarla, dado que ella oponía resistencia cogiéndole por los genitales y dándole patadas. EFE