La directora general de Inmigración insta a los extranjeros a adaptarse a las normas valencianas El presidente del Consejo Islámico Valenciano, Imad Al – Naddaf, pidió ayer al Consell la creación de escuelas públicas bilingües y que se enseñe religión musulmana en los colegios. Al – Naddaf hizo esta petición tras la visita a la Gran Mezquita del vicesecretario regional del PP, Ricardo Costa; la concejala de Bienestar Social de Valencia, Marta Torrado, y la directora general de Inmigración, Lina Insa.


Además, el presidente del Consejo Islámico consideró que sería necesario, para impartir la materia, buscar a gente cualificada para que los jóvenes “no caigan en manos de extremistas”. En la reunión, que llevó a los representantes políticos, junto al imán, a un recorrido por las instalaciones del centro, también manifestaron sus inquietudes representantes de la comunidad islámica en Valencia procedentes de 15 nacionalidades.


El encuentro sirvió para plantear un tema que, hasta ahora, no se había tratado en profundidad: el de la segunda generación de musulmanes. Se trata de los hijos de matrimonios mixtos (entre españoles y musulmanes que llegaron a Valencia en los años 60), que son españoles. Para Al – Naddaf, es necesario trabajar “para que esta juventud sienta que ésta es su patria, su tierra”.


Para ello, pidió también la colaboración entre los distintos organismos. Uno de ellos sería la Gran Mezquita, entendida como el “puente” entre los musulmanes valencianos y las instituciones, y punto de encuentro tanto de la cooperación como de las inquietudes de la comunidad musulmana.


Los dirigentes populares y del Consell que participaron en la reunión se mostraron dispuestos a recoger las propuestas del Consejo Islámico. Ricardo Costa ofreció su “colaboración y ayuda” a la comunidad musulmana porque, dijo, “sin ellos no se entenderían las propuestas y las políticas del PP”. En la misma línea, la concejala Marta Torrado aseguró que el Ayuntamiento continuará colaborando con estos colectivos y tratará de incrementar los “lazos” con la comunidad islámica.


Por su parte, la directora general de Inmigración recordó que “los extranjeros que llegan aquí han de adaptarse a las normas de convivencia de esta ciudad”.