Un total de 1.421 niños ecuatorianos nació en Cataluña en el lapso de un año, según el último informe de natalidad del Instituto de Estadística local (Idescat) que revela los datos correspondientes al 2005.

Alexandra Guamán, quiteña de 28 años, recuerda que en el 2000, cuando llegó a Barcelona, prácticamente no se veían niños en las calles y parques. “La situación es distinta, porque los migrantes hemos venido a quedarnos y a formar familias”.

La ecuatoriana no olvida el 24 de mayo del 2002, porque ese día nació su hijo en la Maternidad de Barcelona. “Se llama Dylan, es un nombre que me gusta desde que estudiaba en el colegio”, manifiesta.

Explica que también tiene una sobrina que nació en Cataluña, hija de su hermana Patricia. “La niña se llama Jennifer y en noviembre próximo va a cumplir 5 años. Además, dos amigas mías, igualmente de Ecuador, han tenido sus hijos aquí en Barcelona”.

Según el Idescat, los datos confirman que la tasa de nacimientos se recupera en esta zona de España por dos razones: la primera tiene que ver con la llegada a la edad de máxima fecundidad de los 112.000 catalanes nacidos en 1975 y a los intensos flujos migratorios registrados en los últimos años, principalmente en Barcelona.

En el 2005 hubo 79.547 nacimientos de niños, de los cuales, el 16,2% es hijo de extranjero, mientras que el 7,1% corresponde a infantes en que uno de los progenitores es inmigrante.

La distribución porcentual de los nacimientos según la nacionalidad de los padres ha cambiado desde 1998. El crecimiento más importante corresponde a nacimientos en los que ambos progenitores son extranjeros, ya que entre ese año y el 2005 las cifras han pasado de 2.566 a 12.872, un incremento del 400%, cuando en el mismo periodo el número de hijos de españoles aumento solo 16,6%.

En el 2005, los nacimientos en que ambos padres son extranjeros corresponden a madres de nacionalidad marroquí (4.643), seguidas de las ecuatorianas (1.421), chinas (863), rumanas (676) y bolivianas (515), principalmente.