El «Marine I» ha desaparecido de las costas mauritanas. Entre otras cosas,
porque las autoridades del país africano «exigían sacar el barco de su
puerto», según informaron a Efe fuentes de la Autoridad Portuaria. Así que
Salvamento Marítimo ha sido el encargado de remolcar al buque «negrero»
que pasó dos meses en altar mar con 404 inmigrantes que, tras pasar más de
una semana frente a las costas de Mauritania, fueron desembarcadas en el
puerto de Nuadibú. Salvamento Marítimo expuso, además, que la embarcación
tampoco se podía dejar a la deriva porque supondría un peligro para la
navegación.     Las autoridades españolas decidieron trasladar el buque
hasta Tenerife porque es donde tiene base el remolcador «Luz de Mar», que
acudió a su encuentro el viernes 2 de febrero cuando se encontraba
averiado y los inmigrantes se habían quedado sin los víveres necesarios.
El «Luz del Mar» lo llevó hasta aguas de Nuadibú, y se mantuvo a su lado
durante las negociaciones para el desembarco de los inmigrantes.