"La Crónica". MÉXICO: "Alertan en EU por secuestros a migrantes"

Prensa Latinoamericana, 15-02-2007

En las últimas dos semanas, las autoridades federales han investigado cuatro casos de contrabandistas de inmigrantes que asaltan a rivales para secuestrarles sus clientes y retenerlos en procura de rescate.

Aunque no se sabe todavía si está aumentando este tipo de incidentes en Arizona, la reciente ola de casos similares resalta la creciente violencia en esa actividad ilegal e ilustra los recursos a los que apelan los ``coyotes’’ para tratar de ganar dinero fácil en Estados Unidos.

El caso más reciente ocurrió la semana pasada en el condado de Pima, donde las autoridades locales creen que contrabandistas armados intentaron arrebatar a los clientes, inmigrantes indocumentados, de coyotes rivales al norte de Tucson. Tres personas murieron en el incidente.

Arizona, el punto de entrada más concurrido por indocumentados en la frontera con México, ha presenciado más casos similares que todos los demás estados sureños. En los últimos cuatro años, también se han registrado unos pocos casos en Houston, dijeron las autoridades.

En este tipo de enfrentamientos, coyotes armados suelen detener en la carretera el vehículo de un rival, se apoderan por la fuerza de los indocumentados en su interior, los encierran en una guarida y presionan a amigos y familiares de las víctimas a juntar dinero para pagar rescate.

Piden rescate
Como los rescates suelen oscilar entre mi 200 y dos mil 500 dólares por persona, un vehículo abarrotado con una veintena de inmigrantes puede resultar muy lucrativo.

Las autoridades dicen que los coyotes se interesan en asaltar a sus rivales porque de este modo no tienen que pagar empleados para reclutar emigrantes en México ni guías para conducirlo por el desierto de Arizona.

``Se ahorran muchos gastos’’, explicó Angel Rascon, que supervisa las investigaciones sobre contrabando humano en Arizona para la agencia policial de Inmigración y Aduanas. ``Todo lo que recaudan por los rescates es para ellos’’.

Los coyotes han arrebatado clientes a sus rivales a pocos pasos de la frontera. Los incidentes también tienen lugar en guaridas de los coyotes en Phoenix, punto de cruce para el transporte de indocumentados a empleos en todo el país.

Recuento doloroso
En el 2003, en uno de esos asaltos en la carretera interestatal 10, cerca de Casa Grande, los atacantes dispararon contra dos vehículos en movimiento que transportaban inmigrantes indocumentados. Hubo cuatro muertos y cinco heridos.

El tiroteo también causó un choque entre tres vehículos que hirió a tres personas no relacionadas con los contrabandistas.

Este tipo de asaltos comenzó a fines de 1990 y desde entonces se ha mantenido estable.

Agentes de inmigración en Arizona han investigado más de 60 casos entre abril del 2005 y julio del 2006. Desde entonces sólo se han reportado cinco, incluyendo los cuatro de las dos últimas semanas, dijeron funcionarios.

Rascon dijo que todavía falta bastante en la temporada de mayor tránsito de indocumentados, que suele comenzar a mediados de enero y concluye en mayo,para determinar si esos casos aumentan en Arizona.

Pero las autoridades agregaron que es probable que algunos casos queden sin denunciar.

El teniente Anthony Vásquez, a cargo de la unidad de investigación de robos en la policía de Phoenix, dijo que los coyotes creen que el temor a la deportación hace que los inmigrantes no denuncien los secuestros.

``En su mayor parte, estas víctimas no van a presentarse para tratar de llevar ante la justicia a los coyotes, y éstos lo saben’’, dijo Vásquez.

Los inmigrantes que aguardan el pago de su rescate pueden sufrir numerosos abusos, como agresión sexual, golpizas y aun asesinato.

Los atacantes además no respetan los pagos por adelantado que los inmigrantes pueden haber abonado para su cruce fronterizo.

Después del pago del rescate, algunos coyotes ayudan a los inmigrantes a llegar a su destino.

``En otros casos, recogen el dinero y literalmente los dejan en la calle en Phoenix’’, agregó Rascon.

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