EFE
Las Palmas de Gran Canaria

Los centros de retención de inmigrantes de Canarias sumaban hasta ayer 790 internos, 40 más que el pasado 29 de enero pero que sólo suponen el 12,3 por ciento de su capacidad, según confirmó la Delegación del Gobierno en el Archipiélago.

La cifra de retenidos sigue estando así muy por debajo de la cantidad de plazas disponibles en total en las cinco instalaciones de ese tipo existentes en las islas, unas 6.400, destacaron las fuentes de la Delegación del Gobierno.

Un departamento desde el cual dijeron no tener datos sobre si entre esos 790 internos figuran los 35 inmigrantes desplazados ayer desde Mauritania a Canarias tras desembarcar del buque “Marine I” ni sobre cuál ha sido el destino concreto de esas personas una vez llegaron la noche pasada al Archipiélago, en un vuelo cuya existencia confirmó hoy el Ministerio del Interior.

Subrayaron, en cualquier caso, que la ocupación es mínima en la práctica totalidad de dichos establecimientos, repartidos entre Fuerteventura, Gran Canaria y Tenerife, isla ésta en que, por ejemplo, está ya vacío el centro acondicionado en las antiguas dependencias militares de Las Raíces, con capacidad para 3.120 personas.

En Gran Canaria, la antigua prisión militar de La Isleta alberga sólo a 193 internos, en un lugar con capacidad para acoger a 1.410, y la situación es similar en las instalaciones de Fuerteventura, donde hay 287 ocupantes para 1.269 plazas.

Sólo hay porcentajes de ocupación más significativos en los centros estables de retención de extranjeros de Gran Canaria y Tenerife.

Así, en el primer caso, el centro de Barranco Seco, con capacidad para 168 internos, alberga a 79, mientras que, en Tenerife, el de Hoya Fría, de 326 plazas, tiene 231 ocupantes.
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