pamplona. El Gobierno de Navarra inauguró ayer la Oficina de Atención al inmigrante, ubicada en la calle Monasterio de Vadoluengo 4, en el barrio de San Juan. La oficina, enmarcada dentro del Plan para la Integración Social del Inmigrante, aprobado en 2001, tendrá como objetivo atender a los inmigrantes que llegan a la Comunidad Foral, facilitar el acceso a los recursos de integración y coordinar la actuación entre asociaciones e instituciones.

El nuevo servicio ha costado un total de 146.204 euros y estará coordinado por María Jesús Vicente. Cuando el despacho funcione a pleno rendimiento, está previsto que en él trabajen 14 personas, entre trabajadores sociales, educadores, sociólogos y personal administrativo. Además de los servicios ya citados, la oficina funcionará como un observatorio de la inmigración, disponiendo de datos actualizados para ofrecer una mejor atención. Otro de los objetivos será constituirse como oficina de intereses, facilitando el contacto entre inmigrantes de Navarra y sus países de origen. Según explicó María Jesús Vicente, esto permitiría que las personas afectadas no tuviesen que desplazarse hasta sus consulados en otras comunidades ya que podrían realizar los trámites directamente en la oficina.

El despacho fue inaugurado por el presidente del Ejecutivo foral, Miguel Sanz, quien señaló que la tasa de desempleo inmigrante ha descendido un 7% en Navarra, mientras que en el Estado ha crecido en un 16%. Sanz recordó que la Comunidad foral es una de las que más inmigrantes acoge del Estado, llegando al 10% de su población, por lo que señaló la importancia de “favorecer” su integración “en la vida política y social”. Al acto acudieron también la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina y los consejeros Javier Caballero e Isabel García Malo, así como representantes de las asociaciones de inmigrantes. >a. pradilla