A pesar de la legalización de los Latin King en Barcelona y de los cambios positivos que se han evidenciado, esta no ha solucionado todos los problemas del grupo, ya que algunos de sus miembros han participado en incidentes, aunque no han sido masivos.

“Además, las relaciones con los Ñetas son buenas al punto que en un año no se han registrado peleas entre miembros de ambos grupos”, expresa uno de sus integrantes.

Entre los Latin King también se mantiene el miedo a los medios de comunicación, situación que impide que el proceso de integración de los jóvenes inmigrantes se realice con rapidez. Un caso ocurrió cuando un canal de televisión usó, para ilustrar una noticia sobre delincuencia juvenil, las imágenes de la rueda de prensa que el grupo dio hace seis meses para anunciar su legalización.

En otros casos, algunos de sus miembros laboran en diversas actividades como la construcción o comercios.