Antes de ser un país receptor de emigrantes, España vio como buena parte de su población, cerca de tres millones de personas, tuvo que trasladarse a otros países para ganarse el sustento. Camino a casa, la serie de seis capítulos que esta noche estrena La 2, devuelve la voz a aquellos españoles y cuenta, desde sus testimonios, la historia de una aventura que hoy parece ya el pasado remoto.
“Con este programa queremos contar que España ha sido un país emigrante por necesidad, por hambre. Esto parece que se ha olvidado, y es importante que el pueblo español sepa lo que ocurrió hace apenas 60 años”, explica Jesús González, director de programas de TVE. Adolfo Dufour, realizador de la serie, considera que los documentales “tienen rigor histórico, pero al estar contado por los propios protagonistas, y aderezado por los diferentes parajes de los campos o de las ciudades, también se llenan de sentimientos de las personas”.
El capítulo con el que esta noche se estrena Camino a casa está dedicado a los españoles que se fueron a Argentina. María Ángeles, una emigrante a aquel país que ahora vive en el barrio madrileño de Lavapiés, cuenta en el documental su aventura, el viaje que hizo con sus padres y hermanos hasta Patagonia desde un pueblo asturiano y el desarraigo sufrido durante todos los años que vivió fuera de su tierra.
“Pretendemos recuperar la memoria de los emigrantes que salieron de España, contribuyendo al desarrollo económico y democrático del país, y rendirles homenaje”, asegura Dufour. Camino a casa se ocupará en los cinco siguientes capítulos de los españoles que se vieron obligados a emigrar a Venezuela, Australia, Bélgica, Brasil, Argelia, Francia y Suiza.