Dos mujeres fallecieron y 858 sufrieron lesiones por violencia de género Dos mujeres fallecieron y 858 sufrieron lesiones por violencia de género

Protesta por la muerte de Begoña Bohoyo en Donostia, asesinato que tuvo lugar en 2005.Foto: j. echezarreta/efe

Donostia. Las detenciones por malos tratos se incrementaron el año pasado en Euskadi un 18,20% respecto a 2005, según informó ayer el Departamento vasco de Interior. Durante 2006, un total de 902 varones, frente a los 763 del año anterior, fueron arrestados por agredir o amenazar a su pareja, o bien por quebrantar una orden judicial de alejamiento con relación al entorno de la víctima. No obstante, la policía realizó unas tres mil actuaciones relacionadas con este tipología de delitos contra las mujeres.

Como consecuencia de estas agresiones, dos mujeres perdieron la vida y otras 858 sufrieron lesiones de índole diversa.

La primera víctima, una mujer de 39 años, fue asesinada por su marido, quien después se suicidó, en Barakaldo. Los cuerpos de ambos, de etnia gitana, fueron encontrados el 28 de mayo, domingo, en el interior de una furgoneta aparcada en una zona boscosa de la ciudad fabril con sendos impactos de bala. Al principio, la policía barajó un ajuste de cuentas, pero el hallazgo de una escopeta en el interior del vehículo encaminó las pesquisas hacia una investigación sobre violencia de género que, posteriormente, fue confirmada por Interior.

La segunda víctima se llamaba Loredana Andriescu y era de origen rumano, aunque residía en Basauri. Contaba sólo con 21 años cuando el 3 de julio su compañero sentimental, seis años mayor que ella, acabó con su vida tras asestarle varias cuchilladas.

con protocolo A lo largo de estos últimos años el aumento de casos de violencia de género, que ha motivado asimismo un incremento de la sensibilización social respecto a esta problemática, ha contribuido a que las instituciones empleen más recursos para atajar la violencia. En esa línea, la Ertzaintza impartió en 2006 cursos de perfeccionamiento y especialización a más de 2.000 agentes.

Otro paso en ese sentido fue la aplicación, desde el pasado mes de diciembre, de un protocolo unificado que rige las pautas a seguir ante este tipo de casos para todas las comisarías de la policía.

Durante los próximos doce meses, el sistema será analizado tanto por evaluadores internos como externos con el objetivo de obtener un certificado de calidad ISO.

Básicamente, el protocolo consiste en el seguimiento de cada uno de los pasos que se dan en la atención a las víctimas de esta clase de delitos. Según informó Interior, de este modo se garantiza que se “las informa correctamente sobre los derechos que las asisten, sobre la posibilidad de solicitar una orden de protección y sobre los servicios de asistencia letrada”, entre otros.

Además, la Ertzaintza dispone de otro tipo de recursos preventivos que permiten atajar situaciones de riesgo, como más de 200 terminales del teléfono Bortxa o 13 mujeres en situación grave escoltadas.