"El Comercio". ECUADOR: "Ecuador ratificó lucha contra el discrimen racial"

Prensa Latinoamericana, 03-02-2007

Tres instrumentos internacionales contra la discriminación racial fueron presentados, el jueves, en Quito.

Bajo el lema: “Boyokani, moninga, kosamba”, en lengua africana, “de acuerdo amigo, vamos a argumentar jurídicamente”, se realizó el lanzamiento de un documento que recoge declaraciones y acuerdos suscritos por el país. La publicación cuenta con el respaldo de la Secretaría de Desarrollo Social, el Municipio de Quito y organizaciones de afrodescendientes.

Primero se retoma la Convención Internacional sobre la eliminación de todas las formas de discriminación racial.

Esta fue adoptada y abierta a la ratificación en 1965 y consta de 25 artículos. Ecuador la ratificó en 1966. Allí se resume que la discriminación racial denota toda distinción, exclusión, restricción o preferencia, basada en motivos de raza, color, linaje u origen.

El segundo instrumento es el Convenio sobre los pueblos indígenas y tribales, suscrito en 1998. Este fue ratificado en el Ecuador en abril de 1998. Este incluye 10 partes, con 44 artículos, que reseña desde una política general, tierras, empleo, seguridad social y salud, educación…

Además, se incluyen documentos aprobados por la Conferencia Mundial contra el racismo, la discriminación racial, la xenofobia y las formas conexas de intolerancia. Estos fueron suscritos y aprobados en Ecuador en el 2001, al igual que un programa de acción, donde se reivindica derechos, espacios…

En el acto de presentación, donde participaron asociaciones y federaciones de grupos negros de Pichincha, se destacó que el racismo es un sistema de poder que estructuralmente da privilegios a ciertos grupos.

Orfa Reinoso, presidenta de la Federación de Organizaciones Negras de Pichincha, dijo que el desafío es tomar las herramientas para que se cumplan, “no como privilegios sino como instrumentos de unidad y equidad”.

Una encuesta señala que el 65 por ciento de ecuatorianos reconoce que existe racismo y el 88 considera que los afroecuatorianos son los que más lo sufren.

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