El sistema de detección de pateras de Lanzarote se retrasa por fallos técnicos

ABC, 31-01-2007

ERENA CALVO

LAS PALMAS. «Está ciego; sus ojos – las pantallas – no ven, y eso es un problema, aunque esté en periodo de prueba», explicaban ayer a este periódico fuentes de toda solvencia sobre el funcionamiento del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) fijo de Lanzarote, cuya puesta de largo se preveía para la primera quincena de enero y que aún sigue sin fecha de inauguración. Según las mismas fuentes se había fijado en principio su presentación en el acuartelamiento de Costa Teguise para el 22 de este mes, y además se esperaba la presencia en la isla del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Sin embargo, «los técnicos son los que más contacto tienen con el SIVE» por el momento. «Ya lleva dos meses de prueba y continúa sin marchar al cien por cien». Desde este sábado «no se puede ver nada en las pantallas que recogen la información», y los técnicos «no han dado todavía con el error». No es el único problema del sistema, «porque tampoco consiguen calibrarlo».

Operación esencial, ya que del calibrado depende que las coordenadas que marcan la posición del objetivo sean o no las correctas. «Si no lo fueran, saldríamos a apresar o a rescatar embarcaciones a puntos totalmente inexactos». Al menos, explican, las cámaras móviles siguen funcionando en Lanzarote y, aunque «no suelen localizar muchas barcas, están en perfecto estado».

El SIVE fijo, en cambio, es una «valla» electrónica que detecta, con márgenes muy reducidos de error, la aproximación de cualquier embarcación a la costa; se emplea, «con gran efectividad cuando todo está correcto», para la lucha contra la inmigración ilegal y el tráfico de drogas. En el Archipiélago, el de Lanzarote será el segundo sistema fijo – el primero se instaló en Fuerteventura en 2003 – , mucho más completo y con mayor alcance que las cámaras móviles instaladas en Tenerife o en Gran Canaria. En esta última isla se habilitará también en los próximos meses un SIVE fijo, previsto – como el de Lanzarote – para 2006 en el Plan Conjunto Canarias Estado para la Inmigración, dotado con 190 millones de euros y vigente hasta 2007.

El sistema de Gran Canaria integrará la información procedente de los despliegues del resto de las islas, y su coste – junto con el de Huelva, adjudicados a Indra – asciende a diez millones de euros.

Vigilancia «sin descanso»

La tecnología del SIVE, de un elevado coste, «no va a estar bien aprovechada en Lanzarote, cuando funcione, por la falta de personal», explican fuentes cercanas al dispositivo. La falta de personal «ha hecho que organicen los turnos con una persona, que tiene que estar ocho horas seguidas, sin descanso, pegada a las pantallas».

Según denuncian, «los riesgos son inmensos; el tiempo que puedes estar con la vista fija en las máquinas está regulado, y no debe ser superior a dos o tres horas». También se quejan de que «les tendrían que haber hecho antes de destinarlos al SIVE una revisión ocular; pero nada de nada».

Por el momento, será la Patrulla Fiscal la que haga las veces de vigía del SIVE. Son quince guardias, «aunque unos cuantos están de baja». Las mismas fuentes aseguran que «no hay ni baños» y se preguntan «qué pasará cuando un guardia tenga que ir hasta el cuartel, a cincuenta metros, si en ese momento se detecta una patera». Apuntan dos respuestas. Para el guardia, la sanción; para el inmigrante, la pérdida del rescate.

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