La federación estatal de asociaciones de inmigrantes y refugiados en España (Ferine) está desarrollando estos días unas jornadas en Canarias para solicitar al Gobierno central lo que para ellos es y representa la fuerza social, laboral, política y cultural de la comunidad inmigrante en el Estado español.

KAREN BENCOMO, Tenerife

La federación estatal de asociaciones de inmigrantes y refugiados en España (Ferine) ha situado unas líneas de trabajo prioritarias derivadas de la delegación de dicha federación en Canarias. Se trata de una federación de asociaciones de inmigrantes y refugiados interesadas en jalonar un proceso organizativo y reivindicativo de los inmigrantes y refugiados residentes en el Estado español.

Dicha federación fue fundada el 3 de diciembre de 2005 y, actualmente, la conforman un total de once asociaciones de diferentes países. Para esta federación, la creación de espacios para la participación y la organización de los inmigrantes y refugiados constituye una herramienta fundamental para la defensa de los derechos humanos y, en particular, del reconocimiento y garantía de éstos a los inmigrantes, refugiados y a sus grupos familiares.

Estos días, la federación está organizando unas jornadas en la Comunidad canaria con las asociaciones de inmigrantes y refugiados. El vicepresidente de Ferine, Esteban Cancelado Gómez, dijo ayer, en rueda de prensa, que tienen el propósito fundamental de reivindicar lo que es, y representa, la fuerza social, laboral, política y cultural de la comunidad inmigrante en el Estado español.

En este sentido, manifestó que “toda persona tiene derecho a escoger un territorio de un Estado y vivir en él, así como poder entrar y salir de su país. Los derechos que nosotros consideramos básicos son desconocidos por el Gobierno español”. Para esta federación, las preocupaciones y reivindicaciones primordiales son las siguientes:

Explotación.- Ferine considera que una de las problemáticas principales de los inmigrantes que están en España es el desconocimiento de sus derechos laborales, económicos, sociales y culturales. Para Cancelado, existe un gran número de personas que llegan a España y que no son consideradas como tales. “En este momento, hay un millón quinientos mil inmigrantes a los que el Gobierno central no ha querido reconocerles ese derecho y los tiene sometidos a condiciones bastante indignas de explotación, que rayan casi con la esclavitud o con la servidumbre”, afirmó el vicepresidente.

Centros de internamiento.- Otro de los problemas que considera esta federación es el tratamiento que se les da a las personas en los centros de internamiento. En opinión de Esteban Cancelado, “prácticamente, someten a estas personas a unas cárceles sin haber cometido ningún delito. El no tener documentos no es un delito sino una controversia”.

Inexpulsables.- “Se trata de personas que el Gobierno, por diferentes razones, no expulsa o no quiere expulsar porque les resulta económicamente muy caro expulsarlos”, dijo Cancelado. En este mismo sentido, apuntó que “estas personas están consideradas como un ejército de reserva para la explotación de personas que están sometidas a una oferta de trabajo en condiciones desventajosas”.

Derecho al asilo.- “Es un derecho fundamental del ser humano cuando considera que su vida corre peligro y pide esa solicitud de refugio a cualquier Estado. En este momento, España tiene una aprobación de asilo del 4 por ciento y consideramos que ese 96 por ciento de negaciones es una violación a ese derecho tan fundamental como es el de asilo”, finalizó su intervención Esteban Cancelado.