Los sindicatos denuncian que la falta de mantenimiento pudo provocar el siniestro La Policía Judicial ha extraído y precintado las máquinas que se estaban utilizando cuando se produjo la muerte de un trabajador marroquí, A.S., durante la ampliación de la línea 7 de Metro a su paso por Coslada, obras que no han sido paralizadas tras el accidente.

Así lo indicó el responsable comarcal de salud laboral de CCOO, Juan Carlos Carrasquilla, quien añadió que el sindicato se presentará como acusación particular si el informe judicial determina que el accidente se produjo por un fallo mecánico, informa Efe.

Según el portavoz del sindicato, el trabajador que conducía el dumper que chocó contra la máquina en la que A.S. se encontraba trabajando en una cesta elevadora «parece que iba diciendo a la gente que se apartara, por lo que a lo mejor no pudo frenarlo».

La víctima mortal, según CCOO, pertenecía a una subcontrata de Dragados, empresa responsable de la obra. El incidente se produjo en un túnel de la futura estación Puerta de Coslada donde A.S., de 37 años y residente en Torrejón de la Calzada, estaba poniendo paneles en el techo.

El alcalde de Coslada, Raúl López, expresó ayer sus condolencias a la familia del trabajador fallecido y calificó el suceso de «desafortunado accidente cuando las obras están ya casi terminadas».

Tanto Comisiones Obreras como UGT denunciaron la falta de mantenimiento de la maquinaria y de formación para su uso como causas del accidente.

La secretaria de Salud Laboral de UGT Madrid, Marisa Rufino, aseguró que una comisión de seguimiento visitó la semana pasada las obras en las que se produjo el accidente y «constató como una irregularidad grave el hecho de que los trabajadores carecían de formación específica para el uso de algunas máquinas, entre ellas los dumper, necesarias para la realización de estas obras». «Ayer (el martes) se constató que, por desgracia, la falta de cumplimiento de las normas de seguridad que están establecidas son la causa de un accidente laboral que ha costado la vida a un trabajador de 37 años».

Rufino declaró que de los accidentes laborales mortales investigados el pasado año por su sindicato, el 30% lo sufrieron trabajadores extranjeros en la Comunidad de Madrid y del total de los accidentes mortales investigados por UGT en 2006 el 44% de los fallecidos estaban subcontratados, «como en el siniestro que tuvo lugar ayer».

A su juicio, la «conclusión final» es «que si se cumpliese la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, se controlase la subcontratación y las administraciones públicas pusiesen el empeño debido muchos accidentes y muertes en el trabajo se podrían evitar».