El vía crucis para los perjudicados por Air Madrid se prolonga aún más. Pese a su angustiosa espera, aún no se termina por definir la fecha para su retorno a España.

Si bien, la Cancillería anunció que ya se escogió a la empresa estadounidense Northeast para el flete de los vuelos, enseguida surgió otro inconveniente: la partida será desde Guayaquil. Eso permitirá que las naves despeguen con más cantidad de pasajeros y equipaje.

No obstante, los emigrantes incrédulos decidieron el viernes pasado exigir al Ministerio de Relaciones Exteriores que les facilite copias del acuerdo con Northeast. También demora la comprobación de los listados en la Dirección Nacional de Migración y la cesión de derechos ante una notaría a favor del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Frente a esta falta de atención oportuna, este grupo de emigrantes decidió formar su propia asociación. Su representante Fernando Benavides anunció que servirá para canalizar la serie de reclamos que emprenderán a su llegada a España.

El dirigente insistió en que “no permitiremos que ninguna otra agrupación quiera aprovecharse de nuestro problema. Por nuestra cuenta trataremos de resolver los inconvenientes en España”.