La estrella de la televisión británica Jade Goody, acusada dentro y fuera de Gran Bretaña de acoso racista por su trato a la actriz de Bollywood Shilpa Shetty, fue expulsada el viernes del concurso “Gran Hermano VIP” por la votación del público.

La famosa de 25 años era la favorita para abandonar la casa después de que fuera presentada como la mala de un programa que ha provocado numerosas protestas y ocupado titulares en Gran Bretaña y la India, provocó que un patrocinador se retirara del concurso y ahora amenaza la carrera de Goody.

Tras salir de la casa del Gran Hermano, que está aislada del mundo exterior, Goody pareció avergonzada tras ver imágenes del programa y de informes recientes.

“No puedo dignificarme porque esas imágenes de vídeo de mí misma son horribles”, declaró. “No voy a sentarme aquí para intentar justificarme. Sí, dije esas cosas y fueron horribles”.

Sin embargo, negó que fuera racista o una “matona”. “No soy racista y sinceramente (…) pido perdón a cualquiera que haya ofendido fuera”, dijo.

Goody, que ascendió a la fama tras una aparición en el “Gran Hermano” en el 2002, también dio a entender que estaba preocupada porque su carrera, construida sobre la telerrealidad, podría estar en peligro.

“Estaba en el inicio de mi carrera y es el fin de mi carrera”, dijo antes de abandonar la casa.

Shetty, una destacada estrella india, fue llamada “perra” durante el programa. Sus compañeros de casa se negaron a aprender su nombre y se referían a ella como “la india”, mientras que la modelo Danielle Lloyd dijo que debería abandonar la casa porque ni siquiera sabía hablar inglés.

Salas de chat en internet, redacciones y periódicos han vibrado con el debate sobre si lo que se dijo en el concurso constituía racismo y hasta qué punto Goody y sus colegas en la casa reflejaban prejuicios presentes en la sociedad.

Algunos comentaristas alegaban que el problema era más de clase que de raza, mientras que otros consideraban que lo sucedido en la casa no eran más que riñas provocadas por los celos.

La propia Shetty dio marcha atrás de comentarios recientes que sugerían que era víctima de racismo y ella y Goody se abrazaron y se reconciliaron el jueves y viernes.

La cadena Channel 4 vio cómo su audiencia creció en más de dos millones de espectadores desde que surgió la polémica.