Los deportados quieren regresar a EE.UU., ya que algunos testimonios así lo revelan, y se confirma con el dato de que sólo 43 de los 385 que volvieron al país en la última semana optarán a los puestos laborales que ofrecen el Ministerio de Trabajo y la Dirección General de Migración.

A pesar de que en el propio aeropuerto se instalaron oficinas de atención al migrante para recabar los datos de los recién deportados que quieran optar a un puesto de trabajo en Guatemala, la mayoría se muestran apáticos ante esas ofertas.

“Intentamos motivarlos diciéndoles que aunque los sueldos que les ofrecemos no son igual de elevados que allá, están en su tierra y con su familia”, comentó Santos Cuc, director de Migración.

Varios migrantes coincidieron en afirmar: “Allá ganamos mejor, buscaremos regresar”.

Desde el 11 de enero, cuando comenzó a funcionar el sistema de empleo para migrantes, llegaron 385 guatemaltecos enviados desde EE.UU. Sólo en enero la cifra se elevó a 828.

Muchos llegan con un nivel educativo superior, por lo que pueden conseguir mejores empleos.

“Han terminado el instituto en EE.UU., tienen un buen nivel de inglés y capacitación técnica, por eso consideramos que se les puede conseguir un buen trabajo”, añadió Cuc.

Sin embargo, hay diferencia entre el sueldo que recibían en EE.UU. y el que se ofrece aquí. “De un mínimo de US$1 mil 500 pasamos a Q1 mil 400”, dijeron varios migrantes.

“Intentaremos que los perfiles de los migrantes se adapten lo más posible a lo que piden los empleadores, para que haya posibilidad de que ofrezcan un mejor sueldo, pero necesitamos que se registren”, apuntó Cuc.

Para dar el ejemplo, Migración y el Ministerio de Trabajo contrataron a cinco de los deportados para que se encarguen del proceso de registro de los migrantes.

El Ejecutivo ofreció 900 plazas cada mes para los deportados, pero, por raro que parezca, escasean los aspirantes.

Algunas cifras

Estos son detalles de la situación de los migrantes que van hacia EE.UU.

Un estudio redactado por la Organización Internacional para las Migraciones afirma que el 27.1 por ciento de los guatemaltecos que emigraron cursaron sólo la primaria.

El 23.5 por ciento no se graduó ni siquiera del nivel primario.

Según otros informes, los guatemaltecos que han emigrado jóvenes elevan su nivel educativo en EE.UU. y completan el diversificado.

Por falta de estudios, la mayoría llega a EE.UU. y trabaja en la agricultura, en empacadoras, fábricas avícolas o en servicios.

Los empleos ofrecidos en Guatemala van desde puestos en empresas como Sarita, hasta supervisores de supermercado, torneros, recepcionistas de call centers o médicos.