Una caravana de organizaciones de derechos humanos latinas recorrerá la frontera entre Estados Unidos y México para reunir testimonios que presentará en febrero en una audiencia legislativa sobre la reforma migratoria en San Diego.

La caravana tiene programadas por lo menos 20 estaciones en las que espera reunir manifestantes pacíficos en demanda de una reforma humana a las leyes estadundienses de migración, informó a Notimex el coordinador Enrique Morones.

“Exigimos una reforma de migración integral y humana, y la queremos ahora. Ya votamos, ya entregamos a los (legisladores) demócratas el control del congreso y ahora queremos acción”, comentó Morones, director del grupo samaritano Angeles de la Frontera.

La denominada Segunda Marcha nacional por los Migrantes partirá el 2 de febrero de la garita de San Ysidro, en la frontera de California con México y punto fronterizo oficialmente reconocido como el más transitado en el mundo.

El pasado 2 de febrero las mismas organizaciones que ahora coordinarán la segunda marcha partieron de la frontera de San Diego a Washington, también en demanda de una reforma migratoria integral que incluyera legalización de indocumentados.

Esta vez, “al reunir testimonios e historias de toda la frontera y entregarlas en la audiencia sobre la reforma en San Diego el 17 de febrero, queremos que los legisladores las lleven a Washington”, como una panorámica de la situación migratoria en esta región, dijo Morones.

El también codirector de la Coalición Gente Unida, una agrupación que se opone a operaciones de los civiles armados autodenominados Minuteman, señaló que los testimonios fronterizos son importantes en el proceso de reforma.

La caravana de varios vehículos por tierra partirá del lugar donde se unen California, México y el Océano Pacifico en el condado de San Diego a Brownsville, Texas, donde confluyen Estados Unidos, el Golfo de México y territorio mexicano del noerestatal estado de Tamaulipas.

Aunque la marcha de la caravana tiene un itinerario previsto en términos generales, Morones aseguró que “como es un acto prolongado de la gente, la gente de la frontera decidirá en cada punto a donde seguiremos” como escala siguiente.

Preliminarmente, la marcha partirá de San Ysidro a un Cementerio de Migrantes Desconocidos en el poblado de Hotlville, en el desierto de California unos 230 kilómetros al este de San Diego.

Luego irá a Calexico, California, para seguir por Yuma, Phoenix y Tucson en el estado de Arizona.

Posteriormente la marcha continuará por el estado de Texas, en El Paso, sin detenerse en el estrecho tramo fronterizo del estado de Nuevo México entre Deming y Las Cruces, hasta que la caravana pase a ese estado a su regreso hacia el oeste.

En Texas visitará Presidio, McAllen, Laredo, Eagle Pass, Zapata Redford y San Antonio, y algunas ciudades fronterizas mexicanas de esas texanas, como Ciudad Acuna, Ciudad Juárez, Nuevo Laredo y Reynosa.

Luego de al menos dos estaciones en lugares aún sin definir en Nuevo México, la marcha llegara a Nogales, Arizona, y luego regresará a San Diego.

“La intención es visitar ciudades de los 10 estados fronterizos entre México y Estados Unidos, donde estamos seguros que hay una demanda generalizada por una reforma humana a la migración”, dijo el coordinador.