ESTRASBURGO – Un total de veinte eurodiputados de siete países forman parte
del nuevo grupo del Parlamento Europeo Identidad, Tradición y Soberanía,
al frente del cual se sitúa Bruno Gollnisch, «número dos» del Frente
Nacional (FN) francés de Jean – Marie Le Pen, que también es miembro de la
formación.
   Después de que el presidente saliente de la
Eurocámara, el socialista Josep Borrell, diera la bienvenida ayer a los
nuevos diputados rumanos y búlgaros, el presidente del Grupo Socialista,
Martin Schulz, denunció que el nuevo grupo no cumplía el artículo 92 del
Reglamento de la Cámara, referente a la visión política común que han de
tener sus miembros. El eurodiputado alemán se basó en una reciente
entrevista de Alessandra Mussolini – nieta del «Duce» y una de las dos
italianas miembros de la formación – en la que afirmaba que el grupo es más
técnico que político, ya que los programas de cada partido no se
corresponden.
   Para Schulz, «los grupos técnicos no son admisibles en
este Parlamento», por lo que pidió que se investigara la idoneidad de la
creación del nuevo grupo. El propio portavoz socialista había escrito
previamente a los presidentes de los grupos solicitando la puesta en
marcha de un «cordón sanitario entorno al nuevo grupo de extrema derecha»,
que evite que sus miembros accedan a puestos de responsabilidad, ya que
«rechazan todos los valores europeos».
   Gollnisch respondió
en el Hemiciclo a Schulz y afirmó que comprendía su «enfado», pero que los
miembros del grupo habían firmado una declaración política a favor de la
identidad europea y las identidades nacionales, así como de los valores
cristianos y los derechos humanos, y en contra del actual super – estado
europeo.
   Rumanos y búlgaros
   Borrell quitó
la razón a Schulz y aseguró que el nuevo grupo no contravenía el citado
artículo del Reglamento. El grupo Identidad, Tradición y Soberanía se ha
formado gracias a la entrada de cinco eurodiputados rumanos y uno búlgaro.
También forman parte del mismo tres diputados belgas, miembros del partido
xenófobo e independentista flamenco Vlaams Belang.
   Gollnisch
está a la espera de un juicio en los tribunales franceses por unas
declaraciones en las que ponía en duda la existencia de las cámaras de gas
nazis.