Un viejo barco pesquero, con unos 190 inmigrantes a bordo, la mayoría de origen asiático, arribó ayer al puerto de La Restinga, en El Hierro, sin ser detectado por los servicios de vigilancia. Buena parte de los irregulares acabaron invadiendo desorientados las calles de la localidad, siendo interceptados por agentes del orden. Llegaron por sorpresa a puerto sin que nadie les hubiera detectado en alta mar. Fue el jueves a medianoche. El Puerto de La Restinga, un pequeño y apacible pueblo de pescadores situado en el extremo Sur de la Isla de El Hierro, que es como decir el extremo Sur de Canarias y de España, recibió –sin que los dispositivos de emergencia y salvamento avisasen con antelación–, la llegada a su muelle de un pesquero. Nada más atracar saltó a tierra un nútrido grupo de inmigrantes irregulares que rápidamente corrieron a internarse por las calles de la localidad, en la que residen unos centenares de habitantes.

En declaraciones a Televisión Española, una vecina, Loli Alvarez, relató que se asomó por la ventana y pudo ver cómo por las calles corrían desorientados y cargados con bultos personas procedentes del puerto, que trataban de ocultarse.

Fue el Servicio de Emergencias del 112 de la Comunidad Autónoma quien dio aviso a la Guardia Civil de la presencia de los inmigrantes en la isla. Una vez establecido el dispositivo de búsqueda, se consiguió a la largo de la noche detener en un principio a 130 inmigrantes, y más tarde fueron localizados el resto.

Bandera española

El pesquero, de nombre Taiboi Stara, tiene 30 metros de eslora, y lleva una bandera española. Los detenidos, que por su aspecto físico podrían ser mayoritariamente asiáticos de origen indio o pakistaní –aunque también hay magrebíes– son todos hombres, dos de ellos menores de edad. Fue preciso realizar dos traslados a un centro hospitalario por deshidratación y otros dos por problemas en cadera. Los servicios de emergencia tuvieron problemas para entablar comunicación con los irregulares, ya que no se trataba de los subsaharianos habituales, que suelen hablar francés o inglés.

Durante la jornada de ayer los irregulares fueron trasladados a un polideportivo de la Isla de El Hierro. para tomarles declaración. A falta de instalaciones de acogida adecuadas en la isla, serán conducidos a la isla de Tenerife hasta proceder a su expulsión a su país de origen.

Tras estos hechos, el presidente de Canarias, Adán Martín, destacó la necesidad de que se instale nuevamente el dispositivo de vigilancia de la Agencia Europea de Fronteras Frontex, para persuadir a las mafias que trafican con seres humanos desde frica a Canarias. “Es necesario que haya un control aéreo con aviones no tripulados y un servicio de guardacostas, porque al final aparece un barco metálico que no ha sido detectado hasta que no está dentro de Canarias”, reclamó el dirigente canario.

Precisamente, el que arribó a La Restinga ha sido el segundo pesquero que en los últimos tres días ha llegado con irregulares a bordo a costas occidentales de Canarias, lo que revela un sistema alternativo para las mafias al de los cayucos y las pateras. El pasado día 9, la Guardia Civil detuvo al patrón de un pesquero, español, que trasladó de Nouadibhou (Mauritania) a Canarias a 14 subsaharianos y un marroquí. La embarcación fue intercepatad en aguas comprendidas entre Hierro y Gomera.