Los testigos acusan al líder de España 2000 de alentar consignas racistas en la manifestación de Ruzafa

Las Provincias, 11-01-2007

Hasta tres testigos señalaron ayer al presidente de España 2000 como la persona que “apuntaba consignas” y “alentaba” a los manifestantes que lanzaron gritos racistas en la manifestación de 2002 en Ruzafa. José Luis Roberto negó cualquier responsabilidad y no quiso responder a las preguntas de la acusación. La manifestación convocada por España 2000 en Ruzafa en marzo de 2002, que terminó con 23 detenidos –prácticamente todos contramanifestantes– y graves disturbios con coches y entidades bancarias dañados, llevó ayer al banquillo de los acusados al presidente de la plataforma política, José Luis Roberto.


El procesado se enfrenta a una petición de tres colectivos de inmigrantes de dos años y medio de prisión y 189.00 euros de multa por provocación al odio racial y manifestación ilícita. Tanto la fiscal como su abogado solicitan su absolución.


Una veintena de personas esperó a Roberto a las puertas de la Ciudad de la Justicia de Valencia. “Exigimos justicia. Castigo a los fascistas y a sus partidos políticos”, podía leerse en la pancarta que portaban, acompañada de una bandera de Ecuador con un crespón negro por el reciente asesinato de ETA en Madrid de dos personas de esta nacionalidad.


Lema de la manifestación

Las asociaciones de inmigrantes responsabilizan al presidente de España 2000 de gritos lanzados en la protesta, como “moros, no”, “España no es un zoo” o “Hitler”.


José Luis Roberto aseguró en el juzgado de lo penal número ocho de Valencia que el lema y objetivo de la manifestación era “contra la droga, la delincuencia y la inmigración ilegal”.


Reconoció que los manifestantes lanzaron insultos y gritos, pero apuntó que lo hicieron “al ser provocados por un grupo que se opuso violentamente a la manifestación y nos lanzó huevos con pintura”.


El procesado negó que indujera ninguna proclama racista, sino que más bien intentó “calmar y evitar el enfrentamiento físico”. Roberto contestó a las preguntas de la fiscal –que no pide condena para él– pero no a las de la acusación popular, a la que reprochó querer hacerle “pagar pena de banquillo”.


Muy distinta fue la versión ofrecida hasta por tres testigos. El portavoz del colectivo marroquí en Valencia, Boughaleb Mimi, aseguró que los manifestantes gritaban consignas racistas en cuanto José Luis Roberto se acercaba y les decía algo.


Violenta contramanifestación

La representante de un colegio de Ruzafa reiteró los gritos xenófobos que se profirieron y aseguró que José Luis Roberto “alentaba” a los manifestantes. El portavoz de la Asociación de Argelinos, Mouloud Talbi, subrayó que las consignas racistas se corearon “dos horas, cuando podían haberlas parado en cinco minutos”.


No obstante, varios policías que declararon ante el juez confirmaron el “carácter organizado y violento” de la contramanifestación que trató de hacer frente a los miembros de España 2000. Un agente los describió como “enmascarados y armados con palos y piedras”. Aseguró que los detenidos fueron “todos contramanifestantes”.

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