Una pelea de vecinos del barrio de La Salud acaba en un pleito por racismo

El Día, 10-01-2007
EL DÍA, S/C de Tenerife

Todo empezó en el pasado mes de noviembre cuando el revuelo que organizaban los jóvenes en la calle ocasionó que “Zoraya” (nombre ficticio de una canaria convertida al Islam que prefiere guardar el anonimato) les llamase la atención por tener a su hijo de cuatro años descansando. Al no hacerle caso bajó gritando a la calle, lo que ocasionó que todos corrieran menos una adolescente, que le plantó cara y se organizó una pelea en la que intervinieron también la madre de la adolescente y una vecina más.

A raíz de este hecho, ambas partes presentaron denuncias ante la Policía por los daños físicos y psíquicos padecidos.

El abogado de Zoraya solicitó además una orden de alejamiento contra sus vecinas, concediéndole el juez la misma a finales de diciembre contra la madre de la adolescente y una amiga que también participó en la supuesta paliza a la joven convertida al Islam.

Esta misma medida piensa presentar hoy la abogada de las tres mujeres, porque, precisamente el pasado lunes, la Policía acudió a las puertas de un supermercado del barrio porque Zoraya y la abuela de la adolescente, de 73 años (según ella), estaban en plena pelea. Al recabar información de ambas partes, cada una culpaba a la otra del inicio de la discusión. Las dos han vuelto a presentar denuncias a la Policía y cada una de ellas tiene el parte de lesiones.

El colectivo Queda la Palabra aboga por que éste es un ataque racista, mientras que la otra parte recalca que el marido de Zoraya se dedica a intimidarlos.

Fuentes policiales indicaron a este periódico que el marido de Zoraya es un argelino que podría estar implicado en el tráfico de drogas.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)