La Llanada Alavesa es la comarca de mayor crecimiento, con una densidad de 25 vecinos por kilómetro cuadrado La Llanada Alavesa es la comarca de mayor crecimiento, con una densidad de 25 vecinos por kilómetro cuadrado

Varias personas pasean por una céntrica calle de la capital alavesa, que acoge a más de 227.000 personas.Foto: alex larretxi

vitoria. La población de la provincia alavesa sigue marcando una moderada pero continua tendencia creciente, mientras los otros dos territorios vascos han comenzado con paso lento a despegar tras un retroceso de su cifra de censados desde 1983, fecha en la que la Comunidad Autónoma del País Vasco registró su cifra máxima de habitantes. Según los últimos datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística, de acuerdo con el censo de empadronados hasta 2006, Álava suma un total de 301.926 habitantes, 1.969 más que en el año anterior y 6.000 más que hace cinco años.

El mayor crecimiento tuvo lugar en la capital alavesa, que experimentó en 2005 un crecimiento del 0,5%, alcanzando los 227.568 empadronados, 1.078 más que en el ejercicio anterior. El incremento se debió, sobre todo, a la llegada de la población extranjera. Vitoria recogió un movimiento migratorio positivo y, como revelan los informes del Instituto Vasco de Estadística (Eustat), con una diferencia de 2.258 habitantes, la capital alavesa recibió a más personas de las que abandonaron la ciudad. Sin embargo, Gasteiz no fue el único municipio que arrojó valores positivos en cuanto a su número de censados, ya que el núcleo de la capital creció en la misma media en que los hicieron el resto de comarcas de la provincia.

por comarcas La zona de la Llanada Alavesa aumentó de las 12.139 personas de 2001 hasta los 13.293 del último censo, lo que supone una densidad de población de casi 25 habitantes por kilómetro cuadrado. Este núcleo de población se ha convertido en estos años en la comarca alavesa que más ha elevado el número de sus habitantes. De acuerdo con el Eustat, Zuia, con la suma de 753 nuevos vecinos registrados, se convirtió en la segunda cuadrilla que más creció en la provincia. De hecho, los seis municipios que conforman esta comarca registraron un moderado incremento de residentes respecto a hace cinco años. No resulta extraño; esta zona y la Cuadrilla de Añana, a pesar de que en la década de los 80 sufrieron un descenso de población, se convirtieron en dos de las diez comarcas vascas más dinámicas a finales de los 90. Y hoy en día esa tendencia día continúa en aumento, aunque en menor medida que antaño.

Por su parte los pueblos de Rioja Alavesa, a pesar de haber sufrido en los últimos tiempos un mayor número de abandonos, continúaron en 2005 con la tendencia en alza del resto del territorio alavés. En la actualidad, lacuna del vino cuenta con algo más de 10.700 habitantes, lo que se traduce en un incremento de 753 vecinos desde el estudio de 2001 del Instituto Vasco de Estadística. Con 34 habitantes por kilómetro cuadrado se ha convertido, tras la capital y la zona de Ayala, en el tercer territorio con mayor densidad de población.

Precisamente la Cuadrilla de Ayala representa en la actualidad un 11% del territorio alavés y sus casi 34.000 habitantes repartidos en cinco municipios conforman el 12% de la población de la provincia de Álava. La densidad de población en el conjunto comarcal se sitúa, según los últimos estudios, en 101,6 habitantes por kilómetro cuadrado. Como era de esperar, Llodio y Amurrio se alzan como los municipios alaveses más densamente poblados tras la capital. Además, esta comarca, al igual que Gasteiz, ha registrado un movimiento demográfico positivo desde los 10.650 habitantes en 1900 hasta los 34.000 censados, aunque se ha percibido un ligero estancamiento en los últimos años.

En la otra cara de la moneda y a pesar de contar con una de las mayores superficies de todo el territorio alavés, 485,30 kilómetros cuadrados, la comarca de la Montaña Alavesa registra la densidad de población más baja de todos los núcleos de Álava. Según los últimos estudios, esta comarca tiene un total de 3.212 personas censadas, unas 120 más de las que recoge el informe del Eustat de hace cinco años.

Movimientos migratorios De los poco más de 50 municipios alaveses, en doce de ellos los datos de emigración superan a los de inmigración. Las localidades de Aramaio, Maeztu, Elvillar, Lagrán, Llodio, Samaniego, Yécora, Navaridas y Okondo registraron en 2005 un movimiento migratorio interno negativo dentro de la Comunidad Autónoma del País Vasco.

No obstante, el dato más preocupante es el de el municipio de la Cuadrilla de Ayala que, durante el último recuento, registró una emigración del pueblo de 310 personas frente a los 274 nuevos vecinos. En el caso de Okondo, los abandonos de ese año ascendieron hasta los 30. Se trata, no obstante, de un dato anecdótico, a tenor de las declaraciones del alcalde de esta localidad, que afirmó que en ese periodo el pueblo experimentó uno de sus mejores momentos en cuanto al número de personas censadas.

Las despedidas del resto de localidades no superó en ninguno de los casos la decena. Y todos esos abandonos estuvieron protagonizados por personas que se fueron del pueblo bien para alojarse en otro o para comenzar la vida en la capital alavesa.

Las localidades de Peñacerrada, Kuartango y Laguardia fueron los tres únicos pueblos de la provincia alavesa que recogieron una migración externa negativa. Los datos de la cuna del vino son los menos alentadores, ya que alrededor de 25 personas dejaron este municipio según el último balance. A pesar del aumento de la población que revelan los datos del Eustat de 2001 a 2005, Laguardia vive una tendencia de declive respecto a su población. En la década de los 90 la localidad contaba con una población de 1.545, casi un centenar menos que los que registra en la actualidad, 1.485 vecinos.

Según el Instituto Vasco de Estadística, las comunidades autónomas que constituyen un polo de atracción para los emigrantes alaveses son Cantabria, Castilla y León, Madrid y Navarra. Estos territorios reciben una de cada dos de las personas que abandonan la provincia.