F. J. POYATO / J. PRIETO

CÓRDOBA. Diversos grupos católicos diocesanos cordobeses respaldaron ayer de forma pública la nota difundida por el prelado Juan José Asenjo en la que rechazaba que la Catedral de Córdoba y antigua mezquita se vaya a abrir al culto islámico por motivos históricos y religiosos, provocando una controversia. A su vez, estos colectivos consultados por ABC criticaron el gesto del presidente de la Junta Islámica, Mansur Escudero, de orar de modo simbólico extramuros del recinto religioso en señal de protesta.

Para la presidenta del Foro Presencia Cristiana, Felipa María Bautista, «no tiene sentido alguno compartir el culto católico de una catedral»; otra cosa es «que haya avances en el diálogo interreligioso en otros ámbitos», destacó. La responsable de este colectivo denotó en el gesto de Mansur Escudero «cierto eco de protagonismo» aprovechando una serie de presiones «que están surgiendo hacia la Catedral de Córdoba».

En la misma línea, Victoria Briceño, presidenta de Acción Católica en Córdoba, respaldó el sentir del obispo y recordó al líder de la Junta Islámica que «al igual que remitió una carta al Papa, tendría que haber hecho lo mismo con los imanes que no dejan entrar a los «infieles» en las mezquitas».

Sobre el rezo simbólico de la mañana de ayer junto a la cara oeste de la Mezquita – Catedral, Briceño manifestó que «para orar no hace falta llamar a los periodistas, es una cuestión íntima».

El presidente de la Agrupación de Cofradías y Hermandades de Córdoba, Francisco Alcalde, (entidad que agrupa a un total de 46 hermandades de pasión y gloria), suscribió también el argumentario del obispo Juan José Asenjo y apostó también por el «acercamiento, desde el respeto, a otros niveles», ya que «la oración conjunta sería difícil de compatibilizar» y tampoco «lo considero positivo».

Religión y política

También Alcalde cuestionó la validez del rezo de Mansur Escudero en cuanto a que consideró que «contribuye a desunir» y resulta «inadecuado». E incluso fue más allá al asegurar que «no sabemos si es el primer paso de algo más que vendrá después». De igual forma, Juan José Primo Jurado, presidente de la Adoración Nocturna Española en Córdoba, señaló ayer que «el primer paso para la convivencia es el respeto mutuo. La libertad y facilidad que tienen los musulmanes para practicar su religión en los países de tradición cristiana, incluida España, no se corresponde con la que tienen los cristianos en los países islámicos». Para Primo, «el Islam no separa religión de política».

Por su parte, el vicario general de la Diócesis de Córdoba y virtual nuevo presidente de Cajasur, Santiago Gómez Sierra, dijo ayer sobre la polémica que ve «desproporcionada» la petición hecha por la Junta Islámica de España al Papa, Benedicto XVI, a la que ya ha respondido negativamente el Obispado.

Gómez consideró que «es una pena» la situación en la que viven los cristianos en los países islámicos, argumentó que «hoy ya no se puede decir que entrar en lo que algunos llaman Mezquita – Catedral de Córdoba sea entrar en una Mezquita», y por ello «da tristeza» que la Iglesia Católica o el Cabildo Catedralicio de Córdoba, que es la titular de dicho templo consagrado al culto católico, se vea «sometida a unas presiones absolutamente desproporcionadas e injustas».

En declaraciones recogidas por Europa Press, añadió que, en el marco de «una mínima reciprocidad, deberían pensar también los responsables (islámicos) y los países musulmanes cómo respetan ellos la libertad religiosa donde son mayoría».