Mª Jesús Vicente, nombrada coordinadora de la Oficina de Atención a la Inmigración

La sede estará situada en Monasterio Vadoluengo y contará con 13 profesionales

La pamplonesa María Jesús Vicente Goicoechea, de 47 años, fue nombrada ayer coordinadora de la Oficina de Atención a la Inmigración, que está previsto se inaugure físicamente y entre en funcionamiento a finales de enero. Según avanza, su trabajo consistirá principalmente en «escuchar» a los ciudadanos, tanto a los inmigrantes, como a sus asociaciones o a personas pertenecientes a la sociedad de acogida. También coordinará e impulsará acciones de los diferentes departamentos del Gobierno de Navarra, y realizará funciones de interlocutora del Ejecutivo foral con la Administración del Estado. Para ello, el nuevo organismo dispondrá de una plantilla de 13 profesionales.

MARTÍN RUIZ. PAMPLONA.

María Jesús Vicente Echeverría, ayer, en el despacho que ha ocupado hasta ahora en el Instituto de Bienestar Social.

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Localización. La Oficina de Atención a la Inmigración estará desde finales de enero en la antigua oficina del INEM de Monasterio Vadoluengo, en el pamplonés barrio de San Juan.

Horario. L
«La integración es el desarrollo como persona en la sociedad de acogida»

– ¿Cuál será el trabajo de la nueva oficina?

– La organización del trabajo se concreta en cinco líneas: coordinación de políticas públicas de inmigración; coordinación con entidades privadas prestadoras de … [leer más]






Madre de una hija de 21 años y otro de 17, nacida y residente en Pamplona, y diplomada en Relaciones Laborales y Trabajo Social, son los principales datos del perfil personal de María Jesús Vicente.

En su trayectoria profesional destaca su experiencia en puestos de responsabilidad dentro del departamento de Bienestar Social de la Administración foral. Funcionaria del departamento desde 1985, ha trabajado en el programa de Atención Domiciliaria y en Inspección. En octubre de 1996 fue nombrada subdirectora de Familia y Servicios Sectoriales del Instituto de Bienestar Social. En mayo de 2003, directora del Servicio de Planificación de la Dirección General de Bienestar Social. Desde marzo del año pasado ha sido subdirectora de la Subdirección de Atención a las Dependencias del Instituto de Bienestar Social, hasta ayer, cuando fue nombrada por el Ejecutivo foral en su nueva responsabilidad.

Se define «abierta, tolerante y comprometida con el trabajo» y se marca como reto al frente de la nueva institución, hacer de ella «una plataforma que recoja propuestas o cualquier iniciativa que sirva para mejorar la calidad de vida de las personas inmigrantes». Lo cual, no tiene duda, «favorecerá su integración social y permitirá al conjunto de la sociedad disfrutar de un mayor nivel de bienestar».

No obstante, aclara desde un principio, que la nueva oficina «no va a tener la función de gestionar prestaciones, o documentos, sino orientar y facilitar el acceso de las personas y entidades de la inmigración a la utilización normalizada de los recursos públicos».