«Con esta última intervención y las realizadas durante el último año, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han asestado un nuevo golpe a los indeseables que se dedican al execrable tráfico ilegal de inmigrantes en Melilla, siguiendo la política para erradicar este tipo de actuaciones contra la dignidad de las personas que caen en manos de estas redes». Así de contundente se mostró ayer el delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, tras conocerse que la Guardia Civil había localizado a un inmigrante asiático oculto en un doble fondo practicado en una furgoneta, disimulado con unos tablones atornillados sobre el suelo a modo de tarima.

El servicio se llevó a cabo el día 22 alrededor de las 20.15 horas cuando agentes de la Guardia Civil del puesto fronterizo de Farhana procedieron a la identificación rutinaria de una furgoneta Renault con matrícula de Melilla que pretendía acceder a la ciudad desde Marruecos y que iba conducida por un joven marroquí.

Al reconocer la zona de carga, los agentes detectaron «cierta anomalía» por lo que procedieron al desmontaje de unos tablones, tras lo que descubrieron una plancha metálica atornillada que cubría un doble fondo en cuyo interior había en posición fetal un hombre asiático que tuvo que ser auxiliado para poder salir, si bien no presentaba síntomas de entumecimiento ni dificultades para respirar pese al poco aire que podía coger.

El conductor del vehículo es M. M., de 22 años, natural y vecino de la localidad marroquí de Nador que ayer fue puesto a disposición judicial en aplicación de la Ley de Extranjería.

El inmigrante irregular tiene unos 27 años y dice proceder de Bangladesh.