HERMOSILLO, Son.- La deportación de niños migrantes por las fronteras del estado aumentó de 2005 a 2006, al pasar de un año a otro de más de 6 mil casos a casi 9 mil.

El DIF-Sonora incluso informó que esta entidad mantiene el primer lugar en el país de recepción de niños deportados sin la compañía de un adulto.

La ilusión de radicar en Estados Unidos cegó a Blanca Karina Guzmán Merche, una mujer de 17 años de edad, originaria de Puerto Vallarta, Jalisco, quien aceptó separarse de su hija, de casi dos años de edad, a quien puso en manos de un pollero.

La estrategia era que madre e hija cruzaran ilegalmente, pero por separada para hacer más fácil las cosas.

Sin embargo, el plan fracasó y la niña fue deportada sola por Nogales, Sonora, desde Arizona.

La mujer midió el peligro que corrió su hija cuando se reencontró con ella y vio que le cambiaron la apariencia, pues le cortaron el pelo para hacerla pasar por hombre, plan del que nunca estuvo enterada.

Aumenta el fenómeno

Blanca Karina es una de miles de mujeres que con tal de cruzar a Estados Unidos aceptan separarse de sus hijos con la idea de que puede resultar menos difícil burlar a las autoridades de ese país.

La cifra de niños que sin sus padres o sin compañía de un adulto son deportados a México por las fronteras sonorenses se ha incrementado, toda vez que el año 2005 se registraron 6 mil 603 casos, mientras que en este 2006 ya rebasan los 8 mil 500.

Flor Ayala Robles Linares, directora del sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del estado, dependencia que tiene a su cargo dos centros de atención a menores repatriados, señaló que el fenómeno de los niños migrantes tiene su origen en la pretensión de los padres de reunirse con sus hijos.

Mencionó que la mayoría de los casos son menores cuyos padres ya se encuentran en alguna ciudad de Estados Unidos y que tienen la capacidad económica de contratar a un pollero para que crucen a sus vástagos.

Otros niños son separados de sus padres antes de cruzar la línea divisoria y con documentos falsos intentan engañar a los aduanales estadounidenses, lo cual algunas veces funciona pero otras no.

Fue el caso de la hija Blanca Karina, a quien el pollero intentó hacerla pasar por un varón y para ello le transformó el peinado.

La directora del sistema DIF-Sonora indicó que la entidad mantiene el primer lugar en recepción de niños deportados sin la compañía de un adulto.