Ciento quince personas, 52 mujeres y 63 hombres, vinieron ayer a El Salvador, deportadas por encontrarse indocumentadas en Estados Unidos. Las autoridades salvadoreñas informaron que este sería el último vuelo grande con deportados que viene de Estados Unidos.

Con este último ingreso de compatriotas, el número de deportaciones llegó a 14 mil 199, de los cuales 3 mil 93 tenían antecedentes penales y el resto fue expulsado por permanecer de forma indocumentada, expresó el subdirector de Migración y Extranjería, Pablo Naser.

De acuerdo con los cálculos, el dato refleja un 99.2% de aumento con respecto al año anterior, cuando la cifra se ubicó en 7 mil 128, entre los cuales unos 1 mil 800 fueron deportados por cometer diferentes delitos.

Y aunque las autoridades de Migración informan que ya no habrá más vuelos masivos hasta principios de enero, varios deportados indicaron que a los que se encontraban detenidos con ellos en el centro de detención de Willacy, Texas, y que no pudieron abordar ayer les indicaron que el 27 habría un nuevo viaje.

Norma Julián, directora del programa Bienvenido a Casa, consideró: “La verdad no creo porque ya se habló con la Embajada (de Estados Unidos) que hasta este día era el último vuelo del año. (…) Aunque nada está descartado”.
“Gente muy maltratada”

Las personas que vinieron ayer no tenían antecedentes penales; sin embargo, cuestionan el trato de criminales que les dan en Estados Unidos, las condiciones en que se encuentran detenidos y el lento proceso de repatriación (como ejemplo toman a los hondureños que son deportados en 15 días), según sus relatos.

Julián coincide con la situación que vivieron los compatriotas y dice que el grupo de ayer es “gente que viene muy maltratada, muy dolida; la gente venía como resentida del maltrato de Estados Unidos”.

Y agrega que “la gente de Estados Unidos (debería mejorar el trato) porque son quienes las han detenido y tal vez un trato más consciente para quienes no tienen antecedentes penales”.