El 63% de la población concedería plenos derechos sólo a los inmigrantes legales
Casi la mitad opina que el Gobierno es demasiado permisivo con los clandestinos, según el primer barómetro sobre extranjería
Diario Sur, 20-12-2006El 63% de los españoles creen que sólo los inmigrantes legales deben tener los mismos derechos y obligaciones que los nacionales. Es la principal conclusión del primer barómetro sobre la percepción de la extranjería realizado por el instituto Metroscopia para el Consejo General de la Abogacía Española (CGCA) y que fue presentado ayer. El estudio, basado en 600 entrevistas realizadas en noviembre, no pregunta de qué derechos deberían gozar los miles de inmigrantes ‘sin papeles’ que se encuentran en España. Actualmente, los clandestinos tienen los mismos derechos que los extranjeros legales, a excepción de los derechos a la huelga, manifestación, asociación y sindicación. La encuesta del CGCA también recoge las quejas de los ciudadanos por la supuesta permisividad de las autoridades con la inmigración clandestina.
Casi la mitad de los encuestados (el 42%) opina que el Gobierno es demasiado blando con los irregulares que llegan al territorio nacional. Un 32% cree que la política de extranjería es adecuada y sólo un 12% considera que la actitud de las autoridades frente a los ‘sin papeles’ es demasiado dura.
Por otra parte, según denunció el CGAE,unos 85.000 inmigrantes hasta ahora legales han perdido sus ‘papeles’ por problemas burocráticos durante el 2006. CGAE asegura que la culpa radica en los «criterios restrictivos» que la Administración introdujo en el actual reglamento de la Ley de Extranjería y en el que se fijaron las reglas de la regularización masiva de 2005.
Los inmigrantes que han perdido sus papeles obtuvieron sus permisos por ofertas en trabajos muy concretos, tales como planchista o limpiador de cristales (y sólo de cristales). El problema radica en que el reglamento establecía que para la renovación del permiso el extracomunitario tenía que haber trabajado un mínimo de seis meses en la especialidad en la que fue contratado. Los más de 85.000 inmigrantes que han recaído en la irregularidad cotizaron durante esos meses, pero en trabajos no idénticos, al haber sido despedidos o al haber cambiado de especialidad.
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