La ONU exige que se respeten los derechos de los más de 190 millones de inmigrantes en el mundo

Diario de Noticias, 17-12-2006

ginebra. La ONU hizo ayer un llamamiento a la comunidad internacional para que garantice el respeto de los derechos de los más de 190 millones de emigrantes que hay en el mundo, con independencia de su situación legal, y reconozca su importante contribución económica y social.

Con motivo de que mañana se celebra el Día Internacional del Migrante, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Louise Arbour, afirmó que la población emigrante “constituye una parte esencial de la fuerza laboral de los países que les reciben, al hacer a menudo el trabajo que otros desprecian y al demostrar una gran iniciativa”. Además, enriquecen culturalmente los países en los que viven, al “abrir una puerta a mundos que de otro modo estarían muy lejanos” y “sirviendo de puente entre personas en un mundo cada vez más globalizado”, añade.

Sin embargo, la ONU reconoce que ambos aspectos reflejan sólo una parte de la situación real, porque, en palabras de Arbour, también implica “explotación, exclusión, discriminación, abuso, violencia y otras violaciones de los derechos humanos”. Además, lamentó que los emigrantes a menudo terminan aceptando trabajos peligrosos e insalubres, con pocas posibilidades de exigir compensaciones cuando se producen esos abusos".

Otros riesgos a los que a menudo se enfrentan son las redes de contrabando y del crimen organizado, advierte la ONU. “No debemos escatimar esfuerzos para erradicar el tráfico humano, proteger a quienes puedan caer presas de esas redes de contrabando y responsabilizar a quienes se benefician del sufrimiento humano”, precisa la Alta Comisionada.

El objetivo último debe ser, según la ONU, que estas personas disfruten de sus derechos, “con independencia de que su situación sea regular o irregular”. Entre esos derechos figuran la protección, el trato no discriminatorio, el acceso a una información adecuada para que el emigrante pueda decidir sobre su futuro y a integrarse en el país de acogida. Para facilitar la consecución de esos retos, Arbour insta a la comunidad internacional a ratificar la Convención para la Protección de los Derechos de todos los Trabajadores Migrantes y sus Familias", que sólo sido suscrito 34 países. >efe

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)