El Gobierno de Senegal enviará este mismo mes al Archipiélago una delegación de expertos para identificar a sus nacionales entre los menores que se encuentran acogidos en los centros del Gobierno canario y reagruparlos con sus familias, pero el Ejecutivo autonómico no tiene conocimiento de estas intenciones.

DORY MERINO, Tenerife

El Gobierno de Senegal enviará este mismo mes a Canarias una delegación de expertos, con el fin de identificar a sus nacionales entre los menores extranjeros no acompañados que se encuentran acogidos por el Ejecutivo autónomo, después de haber llegado a las Islas en cayuco para ser reagrupados con su familia en su país natal, tal y como aseguraron a este periódico fuentes del país africano.

No obstante, la Dirección General de Protección del Menor y la Familia del Gobierno canario no tiene conocimiento de estas intenciones, según manifestaron a EL DÍA fuentes de este departamento de la Consejería de Empleo y Asuntos Sociales del Ejecutivo autónomo.

Las fuentes senegalesas explicaron que la delegación de ese país se encargará de asegurar qué menores son de Senegal y, a través de distintos medios, sobre todo de las fotografías, también buscarán a sus progenitores en el país africano, para llevarlos con ellos, previo consentimiento de la familia.

Además, las mismas fuentes indicaron que España correrá con todos los gastos derivados de esta misión.

La llegada de menores africanos en los cayucos ha ido en aumento desde los primeros meses de este año. En la actualidad son casi 900 los que se encuentran en los centros de acogida de los cabildos y en los de emergencia abiertos antes del pasado verano por la Comunidad autónoma, tanto en Tenerife como en Gran Canaria.

Esta misma semana, en la embarcación que llegó con 92 inmigrantes subsaharianos al puerto de Los Cristianos, había seis menores.

Las llegadas de subsaharianos se habían reducido desde finales de septiembre, pero se reanudaron en estos últimos días. Durante este año han llegado de forma clandestina más de 30.000 inmigrantes a las costas canarias, más del triple del último récord, que se remonta a 2002, con 9.929. Este flujo constante confirma los temores de observadores de Senegal, según los cuales podría tratarse de una falsa calma, que podría incrementarse en 2007.

A pesar del incremento de la vigilancia en aguas de Mauritania y Senegal, siguen saliendo cayucos, pero con más dificultades, lo que se manifiesta en el mal estado en el que llegan ahora los participantes en estas expediciones, con un incremento de los que lo hacen muertos o no lo hacen.