VITORIA. DV. El paulatino envejecimiento de la población vasca se deja sentir en los perceptores de renta básica que en octubre de 2006 alcanzaron la cifra de 27.750, de los cuales 4.417 residen en Gipuzkoa, 20.532 en Vizcaya y 2.801 en Álava.

Según los últimos datos facilitados por el Departamento de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno Vasco en respuesta a una pregunta parlamentaria formulada por el PSE – EE, se estima que los perceptores de más de 65 años de edad llegarán a suponer, a finales de 2006, el 15%, un 7% más que los registrados en enero de 2005. «Contamos con una proporción creciente de perceptores de renta básica mayores de 65 años o próximos a esa edad», afirma el consejero de Justicia, Joseba Azkarraga, que reconoce que esta circunstancia hace que cerca de 3.000 beneficiarios queden excluidos de los convenios de inserción social por razones de edad, ya que los perceptores mayores de 65 superan el 12% y los mayores de 55 años han pasado a constituir un tercio de todos los perceptores.

De otro lado, existe otro 19,4% de personas que se caracterizan por ser menores de 55 años y percibir la renta básica como complemento de sus ingresos de trabajo. En dicha situación se encuentran alrededor de 5.000 perceptores.

A estos habría que añadir el número de personas con especiales dificultades, entre los que se encuentran los discapacitados, afectados por problemas de salud, inmigrantes en situación irregular o los toxicómanos.

A juicio de Azkarraga, la cifra de candidatos a participar en los procesos de inserción, sin contar pensionistas, personas con ingresos escasos y afectados por discapacidad, enfermedad o toxicomanía, se reduce al 50% aproximadamente, lo que traducidos a números absolutos elevaría a unos 10.000 los beneficiarios potenciales para iniciar algún tipo de itinerario de inserción sociolaboral.

Más mujeres

Por otra parte, los inmigrantes constituyen uno de los colectivos que mayor incremento ha experimentado durante los últimos años entre los perceptores de la prestación de la renta básica. Así, por ejemplo, en 2006 se han registrado un total de 4.986 nuevos perceptores, de los cuales el 43,8%, es decir, 2.182 son inmigrantes.

La incorporación de extranjeros como nuevos beneficiarios ha tenido una incidencia en el computo global de los perceptores de renta básica. Así, se pone de manifiesto que de las 27.750 personas que cobran la renta básica, más de un tercio, en total 7.140 son inmigrantes.

Por otra parte, del análisis de los perceptores se desprende que el 60% de los titulares corresponde a mujeres, que casi la mitad de los que cobran la renta básica forman parte de unidades unipersonales mientras que otra cuarta parte integran unidades convivenciales bipersonales.

Otro dato reseñable es que para los perceptores de 25 a 44 años, la proporción de unidades convivenciales encabezadas por mujeres duplica a las encabezadas por hombres. «Esto nos sugiere que que muchos de estas unidades convivenciales son hogares monoparentales, pudiendo estimarse su porcentaje en algo más del 20% de todas las unidades convivenciales beneficiarias de la renta básica», detalla Azkarraga.

Asimismo, se pone de manifiesto que poco más de la mitad de los perceptores percibe íntegra la cuantía mensual de la renta básica que les podría corresponder por la composición de la unidad de convivencia. «Casi la mitad de los perceptores cuentan con otros ingresos, bien procedentes del trabajo o de pensiones bajas», explica el consejero de Justicia, Trabajo y Seguridad Social.