LUIS AYLLÓN. ENVIADO ESPECIAL

DAKAR. Las autoridades senegalesas mantienen su actitud reacia a firmar un acuerdo con España por el que se comprometan de manera escrita a la repatriación de los inmigrantes ilegales que lleguen a nuestro país procedentes de Senegal.

Ayer, durante la breve visita que hizo a Dakar José Luis Rodríguez Zapatero, se firmó un memorándum de entendimiento político en el que los dos Gobierno simplemente se comprometen «a firmar a la mayor brevedad posible un acuerdo marco de cooperación migratoria».

El detalle no es menor porque mientras este acuerdo, de los llamados de «segunda generación», porque incluyen tanto cuestiones de repatriación como de ayuda al desarrollo, no se firme, Senegal siempre tendrá la llave para aceptar o no las repatriaciones.

En los últimos meses, el presidente senegalés, Abdulayé Wade, ha venido cumpliendo su palabra de readmitir a los inmigrantes irregulares llegados a España, pero podría dejar de hacerlo cuando quisiera, y, en estos momentos, a sólo dos o tres meses de unas elecciones presidenciales, no quiere poner su firma en un texto que puede ser impopular y tener un coste electoral.

Ayer, no obstante, los ministros que acompañaban a Zapatero (los titulares de Exteriores, Justicia y Trabajo) firmaron varios acuerdos, algunos de ellos relacionados con la inmigración, como el relativo a la prevención de la emigración de menores y a su repatriación, que las dos partes se comprometen a «favorecer». Por otro acuerdo, se ampliará durante seis meses, a partir del 1 de enero de 2007 la misión de la Agencia Europea de Fronteras (Frontex) para combatir la inmigración irregular.

De igual modo, se suscribió una declaración conjunta con el objetivo de establecer en Senegal, en colaboración con la Organización Internacional del Trabajo, un Centro de Gestión de Flujos Migratorios. Con él se pretende preseleccionar candidatos senegaleses a trabajar en empresas españolas.

De hecho, las autoridades senegalesas ya anunciaron que 75 trabajadores serán contratados antes de fin de año por la empresa Acciona y estiman que hasta finales de 2008, España puede conceder aproximadamente 4.000 visados y contratos de empleo temporales a los senegaleses. Pese a estos anuncios, ayer Zapatero en la rueda de prensa conjunta con Wade, consideró que es «prematuro» dar ahora una cifra. «No hay – afirmó – una previsión numérica y eso estará en función de las demandas de nuestro mercado de trabajo y del cumplimiento de los requisitos de inmigración legal».

En cuanto a la llegada de cayucos a las costas canarias, Rodríguez Zapatero puso de relieve que ha habido un descenso y expresó su confianza en que esa será la tónica que se mantenga.

Ayuda al desarrollo

El presidente del Gobierno se refirió al crédito de 20 millones de euros concedido por España a Senegal para ayuda al desarrollo, señalando que su destino es cubrir necesidades sociales básicas, ayudar a la formación y al empelo y dotar el Plan REVA de fomento de proyectos agrícolas.

El jefe del Ejecutivo, que se reunión con representantes de las organizaciones no gubernamentales españolas que trabajan en Senegal, elogió el trabajo de los cooperantes y subrayó que actualmente hay 44 proyectos que financia España en este país, de los que se benefician, de manera directa o indirecta, unas 480.000 personas. Además, recordó que España ha duplicado en los últimos años la ayuda al desarrollo y dijo que en 2006 llegará a 450 millones para el África subsahariana.

Wade, por su parte, tuvo palabras elogiosas tanto para Rodríguez Zapatero como para la cooperación española, que considera las más eficaz sobre el terreno.