Sanz apuesta por avanzar en el desarrollo de Navarra «sin complejos ni injerencias»

El presidente anima a los inmigrantes a participar en la sociedad y la cultura

El presidente Miguel Sanz apostó ayer en su discurso institucional con motivo del Día de Navarra por avanzar hacia nuevas cuotas de bienestar y libertad, de cultura y de desarrollo sostenible «sin complejos ni injerencias». Y todo, añadió, en el marco de paz y libertad de progreso de España. Según el presidente, «esa es nuestra realidad y no la que algunos pretenden hacernos ver desde el pensamiento utópico o el totalitarismo». En la celebración del Día de Navarra, Miguel Sanz dedicó gran parte de su discurso a resaltar el «beneficio extraordinario» que ha supuesto la inmigración para la comunidad y animó a este colectivo a participar en la actividad social y cultural propia de Navarra.

J.M./M.J.E. PAMPLONA



Miguel Sanz dibujó ayer durante 18 minutos de discurso, una Navarra dinámica, próspera y trabajadora sin querer «mostrar todo de color de rosa».

Después de glosar los méritos de la Casa de Misericordia, Sanz apuntó que la historia de Navarra, siempre y de forma ininterrumpida, ha mantenido un alto nivel de autogobierno. También quiso recordar que Navarra se ha relacionado de forma abierta y solidaria con las otras regiones que forman la nación española.

A juicio de Sanz, el camino del trabajo, de la solidaridad, del respeto a la dignidad humana y al cumplimiento de las leyes es el que los navarros quieren seguir para avanzar en el futuro.

Pleno empleo e inmigración

El presidente afirmó que Navarra vive una etapa de prosperidad «que jamás antes se había dado en el devenir de nuestra historia». Así, Sanz indicó que Navarra es la región española con mayores ingresos por hogar: un 27% más que la media española. También es la comunidad más próxima al pleno empleo y la que dedica una mayor inversión en investigación. «Navarra ocupa el puesto 41 entre las regiones europeas, alcanzando un 125 por ciento de la media europea».

Este progreso ha sido posible gracias al «esfuerzo y entusiasmo» de todos. Por eso, dijo, «no cabe pensar que se puede vivir sin trabajar, que se puede explotar a las personas o engañar al conjunto de los ciudadanos, que se puede burlar la ley en beneficio propio».

En esta dinámica, Sanz resaltó el fenómeno de la inmigración. «Ha sido extraordinariamente beneficioso para el conjunto de la sociedad». Además, «no se han dado entre nosotros los problemas que se asocian a los procesos de emigración masiva en otras partes del mundo», aseguró.

Por contra, Sanz destacó la aportación laboral y humana de los nuevos navarros. «Ha servido para potenciar nuestro desarrollo y nuestro progreso en unos niveles admirables y que, de otro modo, nunca habríamos podido alcanzar». De ahí que el presidente animase al colectivo de inmigrantes a mantener y cultivar las señas de identidad social del país del que proceden y, al mismo tiempo, a participar en la actividad social y cultural propia de Navarra.

Por último, Sanz recordó a los navarros ausentes y a todos aquellos que ayudan a los demás en las misiones. «Dan de Navarra la mejor imagen posible, la de una comunidad generosa y solidaria».